Madrid. AFP España pidió ayer a Marruecos una aclaración de los sucesos violentos ocurridos en el desmantelamiento de un campamento en el Sahara Occidental, en los que murieron varias personas, aunque evitó condenar la actuación de Rabat.
“España considera que deben esclarecerse, de manera urgente, las circunstancias en que se produjeron los hechos y así se lo hemos trasladado al Gobierno de Marruecos”, aseguró Trinidad Jiménez, ministra de Relaciones de Exteriores de España.
La Ministra también dijo que Madrid solicitó a las autoridades marroquíes aclaración sobre las circunstancias sobre el fallecimiento del ciudadano español Baby Hamadi Buyema, ocurrido durante los disturbios en el campamento de saharauis.
Las fuerzas del orden marroquí asaltaron el lunes en El Aaiún, la capital del Sahara Occidental, un campamento levantado por saharauis para protestar por sus condiciones de vida.
El desalojo y enfrentamientos entre saharauis y policías que siguieron a este asalto dejó un balance de 11 muertos, 10 de ellos miembros de las fuerzas del orden, y la detención de 163 personas, según un informe oficial marroquí.
El Frente Polisario, movimiento que reivindica la independencia del Sahara Occidental, antigua colonia española invadida en 1975 por Marruecos, acusó a Rabat de causar decenas de muertos.
Jiménez consideró positivo que Rabat y el Frente Polisario hayan mantenido un diálogo en Nueva York, bajo los auspicios de la ONU y también solicitó a Marruecos que se facilite el acceso a los medios de comunicación a El Aaiún, donde Rabat impuso un total aislamiento informativo.