Buenos Aires. AFP. Las lluvias e inundaciones que azotan a la provincia de Buenos Aires obligaron a extender la emergencia agropecuaria en millones de hectáreas de la rica pampa húmeda argentina, informó ayer una fuente oficial.
Una comisión agropecuaria de la provincia de Buenos Aires resolvió “declarar en emergencia y/o desastre a 17 distritos”, de un total de 135, se indicó en el portal del Ministerio de Asuntos Agrarios, aunque no se consignó el porcentaje de tierras afectadas.
En cambio, la Confederación de Entidades Rurales de Buenos Aires y la Pampa (Carbap, agricultores) afirmó en un comunicado que “hay 6 millones de hectáreas en emergencia que, sumadas a las que están en desastre representan unos 10,5 millones de hectáreas afectadas”.
Este volumen representa un tercio del total del territorio, dañado por la persistencia de lluvias atribuidas al fenómeno climático de El Niño, que reemplazó este año al de La Niña que trajo sequía y pérdidas a la última cosecha.
La provincia de Buenos Aires (centro-este) es una de las mayores productoras agrícolas en un país que es tercer exportador mundial de grano de soya y segundo de maíz, además de estar entre los 10 primeros de trigo.
En las zonas inundadas del centro, sudeste y oeste no se han reportado víctimas ni evacuaciones desde que arreciaron las lluvias a comienzos de setiembre.
Los ruralistas de la Carbap reclamaron, en su comunicado, ayuda financiera inmediata mientras rigen nuevas alertas meteorológicas por las precipitaciones que se esperaban para ayer.
La presidenta Cristina Fernández ya había anunciado la noche del jueves “la realización de obras hídricas por 37,5 millones de pesos (unos $8 millones) para paliar las inundaciones”.
Hasta el momento, la siembra de trigo casi no ha sido afectada, la de maíz está en sus comienzos y la de soya se inicia en octubre, según entidades agrícolas.
Según el Servicio Meteorológico Nacional, las lluvias superaron en agosto los 170 mm cuando el promedio es en torno a los 70 mm.