“Empero, el total de 925 millones de personas subalimentadas, la mayoría en Asia y África, es inaceptablemente alto y muy por encima de los objetivos del organismo mundial para reducir el número de hambrientos en el planeta”, dijo la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés).
El Informe de la FAO sugiere algún progreso en la lucha contra el hambre, pero destaca que el mundo está lejos de alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio, promovido por la ONU, para reducir la proporción de personas desnutridas en los países en desarrollo al 10% para el 2015.
El reporte calcula que hay 98 millones menos de personas con hambre crónica que en el 2009, cuando la cifra superó los mil millones.
La reducción calculada para este año refleja los progresos en China y la India; sin embargo, estas dos naciones representan el 40% de los desnutridos en el mundo. En general, dos tercios de los que padecen hambre crónica viven en China, India, Bangladesh, Indonesia, Pakistán, la República Democrática del Congo o Etiopía, dice el Informe.
La baja reportada se debe parcialmente a que los precios de los alimentos cayeron de sus máximos niveles de 2007-2008, cuando provocaron episodios de violencia en varios países en desarrollo.
Otro motivo es que las cosechas de cereales y arroz fueron sólidas. “La producción de cereales este año fue la tercera mayor desde que se llevan registros, pese a una escasez en Rusia debida a sequía e incendios”, dijo el director general de la FAO, Jacques Diouf.
“Es alentador que las existencias de cereal sean elevadas: unos 100 millones de toneladas más que los bajos niveles de 2007-08”, enfatizó Diouf. Un experto de la ONU en derechos humanos instó a los Gobiernos a aumentar la producción de alimentos.
En Mozambique hubo protestas por los incrementos de precios y la FAO convocó a una reunión el 24 de setiembre para debatir esta alza en los precios.