Un roedor se cruzó en la rica historia del centenario bar y restaurante limeño Cordano, y obligó a su cierre temporal a partir de este miércoles por una orden municipal.
"Cerca de la ventana donde estaban almacenados los postres encontramos un ratón muerto y restos de cucarachas", dijo a la prensa Cristhian Rosenthal, gerente de Fiscalización de la Municipalidad de Lima, al justificar el cierre de la más emblemática cantina de la ciudad tras una inspección inopinada la tarde del martes.
El restaurante, ubicado a una cuadra de Palacio de gobierno, deberá permanecer clausurado hasta que subsane las faltas de sanidad.
Cordano, frecuentado por presidentes, poetas y artistas, es también desde hace décadas referente de guías turísticas de mochileros ávidos por beber un pisco a precios populares o tan sólo regodearse con su arquitectura republicana que data de 1905 con un café de por medio. El local fue declarado patrimonio cultural de Perú en 1989.
La presencia del roedor revivió en la vida real los avatares que en la ficción recreó la película animada "Ratatouille", ambientada en un restaurante parisino con un ratón como protagonista.
El roedor muerto apareció al lado de un pastel de limón recién salido del horno que se encontraba en una ventana hacia la calle para enfriarse, según un empleado de la cocina.
"Están magnificando las cosas. No es una rata lo que han encontrado, sino posiblemente un pericote (ratón) que ha entrado al local. Hace tres días hemos fumigado", explicó Federico Cabeza a una televisora local.
La Municipalidad de Lima le impuso además una multa de 8.100 soles ($2.485).
El Cordano fue fundado por inmigrantes italianos en enero de 1905. Desde 1978 lo administran los trabajadores.