“Hace cinco años se retiraron a última hora. Si quieren hagan lo mismo, pero les vamos a dar una paliza a estos escuálidos (denominación despectiva usada para referirse a los opositores), vendepatrias, corruptos, sinverguenzas, subordinados al imperio yanqui. Aquí están los candidatos de Chávez. Los que quieran patria vengan con Chávez”, dijo el mandatario en uno de sus últimos actos de campaña en el estado Carabobo.
El Jefe de Estado se refería a las anteriores elecciones legislativas en las que la oposición decidió no participar, lo cual la dejó fuera del Parlamento hasta hoy en día.
Los pesos pesados del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), liderado por Chávez, participaron ayer en los actos de cierre de campaña en las principales ciudades del país.
Vestido de rojo y subido a un camión, el gobernante venezolano, que mantiene una fuerte popularidad casi 12 años después de su llegada al poder, fue el motor de esta campaña electoral, durante la que ha recorrido el país acompañando de los candidatos del PSUV.
El próximo domingo, los venezolanos elegirán a 165 nuevos diputados de la Asamblea Nacional (Parlamento unicameral), que desde 2005 está dominada de forma aplastante por el oficialismo.
Para el Presidente, un triunfo es crucial para la transición “hacia el socialismo” y la profundización de su revolución bolivariana.
Según los últimos sondeos, el PSUV tendría alrededor del 52% de las intenciones de voto, lo cual le daría al oficialismo los dos tercios de los escaños, debido al sistema proporcional en vigor.
Hay otras encuestas que apuntan a una intención de votos prácticamente similar entre el PSUV y el resto de fuerzas no chavistas.
Frente a los impresionantes medios del oficialismo, las fuerzas no chavistas llevaron a cabo discretos cierres de campañas en diversas ciudades del país.