Caracas. AP. El candidato presidencial opositor venezolano, Henrique Capriles, afirmó ayer que no se dejará intimidar ante el presunto plan que se estaría preparando para atacarlo, y dijo no sabía si interpretar una declaración del presidente Hugo Chávez como una advertencia o una amenaza.
La incipiente campaña electoral en Venezuela se vio estremecida por la declaración que realizó Chávez en la víspera de que se estaría tramando un plan para atentar contra el candidato opositor.
“Yo soy una persona resteada (arriesgada). Yo no tengo miedo y yo no voy a dejar que esas palabras nos intimiden”, dijo Capriles al responder a lo señalado por el gobernante, quien tampoco dio detalles.
“Quieren que les diga honestamente: uno no sabe si es una advertencia o una amenaza”, agregó.
Sin mencionar el nombre de Chávez, el gobernador del estado central de Miranda fustigó al mandatario y aseguró que su declaración es un poco irresponsable.
“Sin duda alguna, pareciera que lo que hay detrás es crear una intimidación. Probablemente, que nosotros no sigamos haciendo nuestros recorridos”, denunció.
Capriles reiteró su rechazo a la protección que le ofreció el Gobierno, e indicó, en un acto con un grupo de mujeres en la localidad central de Los Teques: “No se trata de ofrecerme seguridad a mí. Cuando uno gobierna tiene que ofrecerles seguridad a todas las personas”.
Aunque la oposición le restó importancia al anuncio del mandatario venezolano, para los analistas la información sobre el supuesto plan para atacar a Capriles alimenta la situación de incertidumbre que existe en el país desde el mes pasado cuando se confirmó la recaída de salud que sufrió el mandatario Chávez, de 57 años.
El analista político Ricardo Sucre consideró favorable la reacción que tuvo Capriles ante la denuncia del supuesto plan de atentado, y afirmó que el candidato opositor no puede “dejar que ese clima de incertidumbre, de duda, de confusión lo invada a él o a su base electoral porque daría ventaja a Chávez”.
El anuncio del mandatario sobre el presunto plan de atentado contra Capriles se produce a dos semanas de un ataque que sufrió el candidato opositor y su comitiva durante un acto político en la barriada pobre de Cotiza, al norte de la capital. En el incidente resultó herido de bala un joven simpatizante del candidato opositor.
Capriles, de 39 años, anunció este mes que, pese al incidente en Cotiza, continuaría adelante con los recorridos por la capital y otros estados del país, como parte de las actividades de precampaña que comenzó en marzo. El inicio formal de la campaña electoral está previsto para el primero de julio.