Un portavoz de la Policía Nacional Civil (PNC) dijo que las víctimas, de entre 18 y 30 años, tenían disparos en diversas partes del cuerpo. Además, añadió que sus caras estaban cubiertas con bolsas de plástico y también presentaban heridas de arma blanca.
“Cuatro cuerpos estaban en un mismo lugar, mientras que otros dos aparecieron a unos 400 metros metros de distancia”, explicó un vocero de Bomberos Voluntarios, Sergio Vásquez.
“Hasta el momento no ha sido posible identificar a ninguna de las personas debido a que carecen de documentos”, precisó la fuente de la Policía Nacional Civil.
En los alrededores del lugar donde fueron encontrados los cuerpos de las dos mujeres, las autoridades hallaron documentos personales, como licencias de conducir, y tarjetas de crédito a nombre de personas que el jueves denunciaron haber sido asaltadas en distintas partes de la ciudad.
En el sitio del hallazgo funciona una terminal de autobuses que presta servicios a poblaciones cercanas a la capital.
Versiones no confirmadas por las fuerzas de seguridad apuntan la hipótesis de que las seis víctimas integraban una banda de asaltantes que opera en la capital y que sus muertes pudieran responder a una “limpieza social” por parte de grupos clandestinos.
Los altos niveles de violencia que padece este país centroamericano se cobran cada día un promedio de entre 16 y 18 víctimas.
La mayoría de los casos, según las autoridades, están relacionados con las actividades del crimen organizado.