“Entró en coma hace dos días. Se encuentra en el hospital de Yedá”, en el oeste de Arabia Saudí, declaró una fuente del entorno de su familia.
“Sufrió un ACV (accidente cerebrovascular), se encuentra en estado grave”, añadió esta fuente contactada por teléfono en un país del Golfo.
El exmandatario, quien gobernó 23 años, había ingresado con falsa identidad, por razones de seguridad, en un centro hospitalario exclusivo utilizado por la familia real saudí. “Su estado es muy preocupante”, precisó la fuente.
Ben Ali sufría desde hace años de un cáncer de próstata, pero el accidente cerebrovascular que padeció el martes no guarda ninguna relación con su enfermedad crónica. Más bien sería producto del disgusto que padece tras su derrocamiento.
Ben Alí, de 74 años de edad, y su familia huyeron a Arabia Saudí el 14 de enero después de casi un mes de revuelta popular.
Su esposa, Leila Trabelsi, de 53 años, no está con él en Yeda. Se encontraría en Emiratos Árabes Unidos o en Libia. Durante casi toda la crisis Trabelsi no estuvo en Túnez sino en Dubái, desde donde llamaba a su marido instándole a aferrarse al poder.