México. AP. Dos policías federales que asesinaron a tres de sus compañeros en el aeropuerto internacional de la ciudad de México pertenecen a una red de tráfico de droga de Lima, Perú, a la capital mexicana y en la que se presumen participan otras autoridades aeroportuarias, informó hoy la corporación.
El jefe de seguridad regional de la Policía Federal, Luis Cárdenas Palomino, informó en rueda de prensa que los tres agentes fueron asesinados en medio de una acción para detener a uno de los policías involucrados en la red, pero fueron sorprendidos por un segundo agente corrupto que los atacó a tiros para posteriormente huir.
Cárdenas detalló que durante el tiroteo en el área de comida rápida de la Terminal 2 del aeropuerto, la cámara de seguridad fue desviada intencionalmente, aunque no reveló quién habría sido el responsable.
El control de las cámaras en la terminal depende del área de seguridad de la dirección aeroportuaria, aunque expresó que hasta el momento la Policía Federal no investiga al titular del aeropuerto internacional.
Otro policía federal, jefe de los dos sospechosos, abandonó el aeropuerto poco después del tiroteo y la autoridad cree que también está involucrado.
Los sospechosos fueron identificados como Zeferino Morales Franco, Daniel Cruz García y Felipe Lugo León.
El funcionario manifestó que la Policía Federal ofrece una recompensa de cinco millones de pesos mexicanos (poco más de $360.000) a quien ofrezca información que permita detener a quienes calificó como traidores.
Cárdenas dijo que la Policía Federal investiga desde hace varios meses una red de tráfico de drogas que involucra a pasajeros procedentes de Lima y a autoridades dentro del aeropuerto.
Refirió que luego de algunas detenciones detectaron que la mecánica del tráfico consistía en que pasajeros procedentes de la capital peruana escondían droga entre su ropa o en su equipaje y al llegar al aeropuerto de la ciudad de México la dejaban en baños localizados antes de los filtros de aduanas y migración, hasta donde llegaban autoridades para sacarla de la terminal aérea.
“Sabemos que debe haber más autoridades involucradas en este tráfico y es lo que está investigando actualmente la Policía Federal; no solamente a elementos de la Policía Federal, sino a todas las autoridades federales que convergen en el aeropuerto de la ciudad de México”, explicó el funcionario.
No mencionó a las corporaciones investigadas, aunque en la terminal también hay fuerte presencia de agentes de aduana y migración, entre otros.
Sólo entre enero y junio de 2012, la Policía descubrió siete casos de pasajeros procedentes de Lima que utilizaban el mismo modo de operación, aunque hasta el lunes antes del tiroteo detectaron específicamente que efectivos federales estarían involucrados.
Cárdenas dijo que el policía Morales fue detectado la mañana del lunes cuando entraba a un baño tras el arribo de pasajeros de un vuelo de la capital peruana y el jefe de la Policía Federal en la terminal ordenó a un suboficial seguirlo y revisarlo.
Un oficial vestido de civil, apoyado por un compañero uniformado, pidió a Morales que abriera su chamarra, debajo de la cual llevaba droga. Cuando iba a ser detenido, el policía Cruz atacó a los oficiales que harían el arresto.
Un tercer oficial de apoyo trató de repeler la agresión, aunque quedó lesionado y posteriormente falleció, mientras varias personas se tiraban al piso presas del pánico.
Morales y Cruz corrieron para huir del lugar y nunca fueron detenidos. Salieron de la terminal y abordaron un taxi.
El funcionario de la Policía Federal aseguró que se había montado un operativo que incluyó el bloqueo de salidas y entradas, aunque justificó que los sospechosos no fueran detenidos porque iban uniformados y sus compañeros no habrían pensado que ellos eran los responsables del tiroteo.
“(El) personal no los detiene porque está viendo que está huyendo personal vestido de Policía Federal”, señaló.