En el 2011, bajo el influjo de la grave situación financiera de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), la presidenta Laura Chinchilla nombró una comisión de notables encargada de diagnosticar las falencias y proponer soluciones. En el informe, los expertos criticaron los procesos de compra de bienes y servicios por la falta de claridad.