La teoría del poder de Hannah Arendt no pone en el centro de la política el vencer, sino el convencer.
Etiquetas
LO ÚLTIMO SOBRE: Pedro+J+Solís
La concepción de justicia en la constitución de una democracia liberal es producto de una etapa más avanzada del desarrollo moral.
No me cabe duda de que los dos progresismos, localista y universalista, persiguen objetivos nobles. El problema principal es que resulta una tarea muy difícil conciliar lo universal con lo particular, lo global con lo local.