Con las manos metidas entre palmas y cenizas. Esa es la imagen que retrata a José Céspedes Garbanzo, quien suma 19 años en una misión encomendada no por los hombres, sino por Dios.
Con las manos metidas entre palmas y cenizas. Esa es la imagen que retrata a José Céspedes Garbanzo, quien suma 19 años en una misión encomendada no por los hombres, sino por Dios.