Una nueva investigación nos da más razones para desayunar bien: el saltarse esta primera comida del día puede endurecer las arterias. Esta condición haría que se dificulte el paso de la sangre y que aumente el riesgo de sufrir un infarto.
Una nueva investigación nos da más razones para desayunar bien: el saltarse esta primera comida del día puede endurecer las arterias. Esta condición haría que se dificulte el paso de la sangre y que aumente el riesgo de sufrir un infarto.