La Sala Constitucional declaró con lugar un recurso de amparo presentado por el administrador de la discoteca gay Club Oh! , Ronald Acuña, tras el aparente uso de fuerza excesiva y trato homofóbico por la Policía durante un operativo, el pasado mes de abril.
Sin embargo, según Marcelo Solano, director de la Policía Municipal de San José, el objetivo de esa noche era revisar el local para ver si tenía vigente la licencia.
“No es cierto que hubo abuso de autoridad”, señaló Solano.
Según el administrador de la discoteca, más de 20 funcionarios intimidaron a los asistentes.
“Esto afectó a la clientela de los fines de semana siguientes”, agregó Acuña.
En el operativo también participaron oficiales de la Fuerza Pública de San José.
Este diario trató de comunicarse con Raúl Rivera, jefe de ese cuerpo policial, para conocer su opinión sobre la decisión de la Sala IV, pero no contestó su celular.
Resolución. Los magistrados acogieron los alegatos del recurrente y previno a la Fuerza Pública y a la Municipalidad de San José de “no incurrir a futuro en los actos que dieron mérito a la acogida de este proceso de amparo”.
“La misma resolución da a entender que hay visos de homofóbia en la actuación de la Policía”, apuntó Marcos Castillo, abogado del ofendido y presidente del Movimiento Diversidad.
De acuerdo con la interpretación del director de la Policía Municipal, la Sala IV no habla de discriminación, sino de la desproporción en el número de agentes.
“La Policía Municipal ha respetado siempre a las diversidades”, concluyó Solano.