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Los docentes han realizado protestas este año contra iniciativas de ley que reforman condiciones para trabajadores del sector público. | ARCHIVO (CARLOS GONZALEZ CARBALLO)
Miles de colegiales tendrán libre mañana martes porque sus docentes participarán en una huelga de un día.
El movimiento es convocado por la Asociación de Profesores de Segunda Enseñanza (APSE) y el Sindicato de Trabajadores de la Educación Costarricense (SEC), cuyos afiliados trabajan en su mayoría en secundaria.
También respaldan la huelga la Central General de Trabajadores y el Magisterio en Acción.
Ellos se oponen a un proyecto de ley impulsado por el Gobierno que, entre otros, recorta privilegios en cesantía, anualidades, disponibilidad y dedicación exclusiva en el sector público.
Dicha iniciativa todavía no ingresa a la corriente legislativa.
Sin embargo, los sindicatos quieren lanzar un mensaje de oposición al proyecto y no descartan que haya una huelga indefinida el próximo año, en caso de que el plan llegue al Congreso.
Por su parte, el Ministerio de Educación Pública (MEP) reprochó el llamado a huelga.
Leonardo Garnier, ministro del ramo, sostuvo que la protesta no se justifica porque el proyecto apenas está en borrador y en fase de consulta a diferentes sectores, entre ellos, los propios trabajadores.
“Antes que una huelga, este llamado sin justificación se asemeja más a un nuevo feriado que solo perjuicio trae a los estudiantes”, opinó Garnier.
Concentración. Gilberth Díaz, presidente del SEC, detalló que esta vez no habrá marcha por las calles de San José, sino que los participantes se congregarán frente a Casa Presidencial, en Zapote.
Los profesores de San José, Alajuela, Cartago y Heredia están convocados a las 10 a. m., para aprovechar que a esa hora se realiza el Consejo de Gobierno.
Quienes dan clases en el resto del país están convocados a manifestaciones en sus comunidades, anunciaron los líderes sindicales.
“Estamos dispuestos a dar la lucha para echar abajo ese anteproyecto; no hay que dejar que el monstruo nazca y crezca”, manifestó Díaz.
Por su parte, Beatriz Ferreto, presidenta de APSE, calificó de “hostigamiento laboral” la propuesta de ley.
