03 de mayo del 2011, Autopista Bernardo Soto, en mal estado salida a Palmares/ caravaca (Marvin Caravaca)
El Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) cerró el primer año de gobierno apenas en primera marcha, con iniciativas que siguen entre planos y aprobaciones y con muy pocos proyectos en ejecución.
El ministro Francisco Jiménez lo sabe y lo acepta. A ese gigante le hace falta músculo, le faltan ingenieros con rangos gerenciales que tomen decisiones, le sobra centralización y aún está en deuda en obras.
El primer año de la Administración de Laura Chinchilla le sirvió para revivir y financiar la nueva carretera a San Carlos, adjudicar el muelle privado de Moín y construir la terminal del aeropuerto de Liberia.
Sin embargo, le faltan brazos para iniciativas varadas: la ampliación San José-San Ramón, que cumple 73 meses de atraso, y concretar, por fin, el tramo pendiente de la Circunvalación Norte.
“Pero de esos 3.600 muy pocos toman decisiones (...). Este MOPT tiene 250 abogados y muy pocos ingenieros; nos topamos un ministerio diezmado en su capacidad técnica, muy debilitado en quienes piensan en proyectos”, dice Jiménez.
Sus críticas se enfocan hacia el Área de Planificación, que se quedó en trámites, pero que abandonó la planificación estratégica de infraestructura y transportes.
Para ponerlo a trabajar y darle gerentes, el ministro llamó de vuelta a profesionales pensionados o que estaban fuera de la institución como María Lorena López, José Chacón Laurito, Héctor Monge, Ronald Flores, Patricia Mora, Mario Badilla yEdwin Rodríguez.
Además, tiene el compromiso de que este año (el segundo de la Administración de Laura Chinchilla), podrá incorporar 80 plazas operativas al Consejo Nacional de Vialidad (Conavi).
“El MOPT debería tener 30 frentes simultáneos de trabajo, pero mientras tanto (mientras recupera más profesionales de experiencia que tomen decisiones), el MOPT tiene que escoger sus proyectos”, agrega Jiménez.
Es por eso que el primer año se quedó en papeles: la vía a San Carlos y el muelle de Moín en proceso de refrendo en la Contraloría, y en concurso la ampliación del tramo Cañas-Liberia, en la carretera Interamericana Norte.
Olman Vargas, director ejecutivo del Colegio Federado de Ingenieros y de Arquitectos, concuerda en la debilidad técnica del MOPT.
“El Ministerio necesita mayor soporte técnico; si uno compara el Ministerio contra el ICE desde el punto de vista técnico, el ICE tiene más ingenieros, tiene procesos mucho más ordenados, más estructurados. Se necesita que prevalezcan las decisiones técnicas sobre las políticas”, señaló Vargas.
Ricardo Castro, presidente de la Cámara de la Construcción, sostiene que el estancamiento del MOPT se repite siempre en el primer año de cada gobierno.
“Por una falta de visión del país, no hay planificación de mediano o largo plazo; no hay continuidad en programas de infraestructura. Debo pensar a 25 o 30 años y el MOPT no lo hace”, declaró Castro.
El compromiso del ministro es resolver la concesión de la carretera San José-San Ramón en el próximo trimestre y ponerle fecha a la construcción del tramo pendiente de la Circunvalación Norte.
“Yo esperaría que al final de los próximos tres años yo pueda dejar al MOPT en cuarta y, si no, por lo menos en tercera, pero desarrollando proyectos”, dijo Jiménez.