El deseo de sentirse bellas y de que otras personas les digan piropos, lleva a algunas muchachas a compartir fotografías en poses sugestivas.
Frineth Araya Fallas, trabajadora social del Patronato Nacional de la Infancia (PANI), dijo que muchas de estas jóvenes tienen baja autoestima y, además, todos los días afrontan la soledad en sus casas.
Agregó que hoy se le da mucha importancia a la apariencia física, y de ahí, “el sentirse que las toman en cuenta, que son valiosas, aunque sea utilizando su cuerpo, porque se ve mucho al joven como objeto sexual y no como sujeto de derecho, que tiene voz y derecho a un desarrollo integral”, aseguró Araya.
Debido a lo anterior, a algunas adolescentes no les molesta que debajo de sus fotografías aparezcan comentarios pasados de tono, incluso de hombres adultos.
Rocío Solís, directora de la Contraloría de Derechos Estudiantiles, del Ministerio de Educación Pública (MEP), explicó que la adolescencia es un momento para definir la identidad.
“Es muy fácil crear un ambiente donde se sientan que son admiradas, aunque no sea con una forma adecuada”, aseveró.
La página en Facebook Colegialasticas no es la primera que expone a menores de edad costarricenses en Internet.
En el 2004, cuatro estudiantes de secundaria se tomaron unas fotografías semidesnudas y, tres años después, un portal electrónico presentó una secuencia de las imágenes, donde las muchachas salían primero uniformadas y luego en diversas poses y actos eróticos.
Para evitar que estas situaciones se repitan, el MEP apuesta al nuevo Programa de Educación para la Afectividad y Sexualidad, que incluye estrategias para mejorar la autoestima de los estudiantes.