Juan Camilo Saldarriaga se convirtió el viernes en el primer extranjero en presidir la Federación de Estudiantes de la UCR . El estudiante de Economía y Filosofía tiene un rumbo y objetivo claros: participar en la discusión política para constuir una mejor Universidad y un país más equitativo.
En el 2002 la situación política de Colombia obligó a Juan Camilo Saldarriaga a hacer maletas y venirse a Costa Rica a solicitar el estatus de refugiado, junto con su familia. Su condición migratoria, sin embargo, no ha sido impedimento para emprender “luchas constructivas”, como él las llama.
En el 2010 ganó un recurso de amparo y una acción de inconstitucionalidad para que personas extranjeras pudieran ocupar puestos de elección popular en la Universidad de Costa Rica.
El viernes anterior fue elegido como presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Costa Rica (FEUCR), convirtiéndose en el primer extranjero y estudiante de Economía en alcanzar ese puesto.
¿Cómo se inicia su deseo de participar en política?
Con el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos. Mi colegio se convirtió en un espacio de análisis, formamos un grupo y decidimos participar en el gobierno estudiantil. Aunque no podía ser elegido, estaba 100% comprometido con el proyecto. Hace dos años me integré al partido Progre y decidí seguir trabajando por una ‘U’ más crítica e inclusiva, por un movimiento estudiantil que fuera mucho más responsable y capaz de contribuir a la sociedad.
¿El no poder ser elegido cambia su forma de ver la participación?
Esa es una de las mayores enseñanzas. Las verdaderas transformaciones se hacen en colectivo, no a través de individuos que son elegidos en un puesto. Si bien yo quedo como presidente, somos un grupo muy grande y todas y todos tenemos la posibilidad de aportar. Esta no es una victoria de Camilo Saldarriaga, es la de una agrupación de muchas personas que creen en un proyecto.
Durante la campaña recibió críticas por ser extranjero, ¿los universitarios no son tan tolerantes a las diferencias como dicen serlo?
Por ser una persona refugiada uno enfrenta situaciones de discriminación; sin embargo, los resultados son claros: quedamos electos por un amplio porcentaje y eso muestra que la Universidad sigue siendo un espacio abierto, plural y muy diverso.
¿Qué es para usted el movimiento estudiantil?
Es diverso por naturaleza, plural. Está lleno de todas esas personas que si bien no estamos de acuerdo en todo, sí tenemos inquietudes para trabajar por una mejor Universidad y un mejor país.
¿Como recuperar la credibilidad en ese movimiento?
Siendo una federación crítica, responsable, propositiva, que aporte a las discusiones y que tenga una argumentación de fondo.
¿La situación política nacional refleja la situación de la FEUCR?
A nivel nacional, hay un descontento muy grande con la política. En el caso de la Federación, se debe más bien a la gestión de un grupo que estuvo en el poder durante casi ocho años y no a una realidad dentro de la U. Desde la Universidad se puede, de alguna manera, encender una pequeña luz que ayude a muchísimas personas a involucrarse de nuevo en la construcción de un país más equitativo.
¿Se va a involucrar la FEUCR en la actividad electoral del país?
Tenemos la responsabilidad de poner temas sobre la mesa y exigirles a las diferentes agrupaciones y candidatos que tomen posiciones al respecto. La preocupación por la decadencia de la educación pública, el incremento en la desigualdad social, la materia ambiental, derechos humanos, sexuales y reproductivos, son algunos de los temas.
¿La protesta ha manchado la imagen de la FEUCR?
El problema no es que salga a pronunciarse, sino que ha salido con posiciones no muy fundamentadas, irresponsables. Queremos una federación que se pronuncie, participe y si es necesario salga a la calle, pero explicando las razones.
¿Dónde se ve en unos años?
En el área académica, porque desde la academia pueden hacerse aportes muy importantes. También quiero contribuir a la elaboración de políticas públicas y participar en la discusión política.
¿Quemaría una llanta?
(Duda)... Somos promotores del diálogo como primera herramienta, pero si es necesario en algún momento tomar posiciones fuertes y beligerantes en defensa de lo que creemos, habrá que hacerlo.