Centenares de personas se unieron ayer a la protesta organizada por el movimiento incurables en el parque de la Merced para exigir a la presidenta Laura Chinchilla y a la ministra de Salud, Daisy Corrales, una disculpa pública.
Once organizaciones de gais y lesbianas, así como personas heterosexuales, llegaron a la cita a las 5 p. m. para protestar por la acción gubernamental, suspendida luego por la Sala IV, de declarar de interés público el V Congreso Centroamericano de Bioética, que concluye hoy en el hotel Radisson.
De acuerdo con Paulina Torres, vocera del movimiento incurables, esa declaratoria violentaba los derechos de la población homosexual e iba en contra del tema de la fertilización in vitro.
Lamentó que la presidenta Laura Chinchilla mantuviera el decreto, y dijo que, de no ser por el fallo de la Sala IV, que anuló la declaratoria de interés público, el Congreso habría contado con todo el respaldo gubernamental.
Ayer entregaron en el Ministerio de Salud una carta con 600 firmas, en la que exigen una disculpa pública a la mandataria y a la ministra por haber sostenido el decreto, y se les hace un recordatorio de todas las instancias que se declararon en contra de ese respaldo.
También se llevó la posición de la Defensoría de los Habitantes, el Colegio de Psicólogos y grupos universitarios, y lo que dice la legislación de salud mental sobre la homosexualidad, afirmó Torres.
Sobre las declaraciones del expositor Jokin de Irala, en el sentido de que ya no tocará el tema de la homosexualidad en su disertación, Torres afirmó que él no puede venir aquí pensando que en este país no hay leyes, reglamentos, derechos humanos ni gente que va a reaccionar ante su propuesta y sus peligrosos criterios sobre la homosexualidad.
Los manifestantes cantaron y gritaron consignas mientras agitaban plumeros, globos y carteles. “Soy más gay que un género”, decía un cartel, mientras otros hacían mofa del diputado Justo Orozco, quien se mostró a favor del conferencista De Irala.
Según varios participantes, el Congreso va contra el movimiento gay y los derechos humanos.