Minutos antes de las 6 p. m., un grupo de 40 oficiales del Unidad de Intervención Policial colocó barreras de seguridad en las afueras del gimnasio Eddy Bermúdez, en Limón.
Este lugar va a ser la sede de la audiencia pública para debatir la viabilidad ambiental de la nueva terminal de contenedores en Moín, proyecto otorgado a la empresa holandesa APM Terminals.
Además, la policía de Tránsito cerró la calle que pasa frente a este recinto por motivos de seguridad.
Desde tempranas horas de este viernes, miembros del Sindicato de Trabajadores de Japdeva (Sintrajap) llegaron a las afueras del gimnasio con el fin de asegurar un lugar en la reunión, lo que provocó una discusión entre los sindicalistas y la Fuerza Pública a la hora de acordonar el sitio.
"Aquí lo que estamos es estableciendo un dispositivo de seguridad ya que este evento es una actividad masiva y requiere seguridad y orden", dijo Pablo Bertozzi, subdirector de la Fuerza Pública.
Carlos Brenes, fiscal de Sintrajap, aseguró que la presencia policial no los intimida y que dormirán en las afueras del gimnasio.
La nueva terminal de contenedores es un proyecto que pretende construir un muelle de 80 hectáreas sobre el nivel del mar para carga y descarga de contenedores.