Las exsiamesas Fiorella y Yurelia Rocha se encuentran nuevamente en su hogar y podrán permanecer ahí si sus progenitores cumplen con las condiciones impuestas por el Juzgado Penal de Hatillo.
Así lo confirmó Ileana Bayar, abogada del Patronato Nacional de la Infancia (PANI), quien representó a las menores en el proceso judicial seguido a los padres.
María Elizabeth Arias y José Luis Rocha recuperaron la custodia de las menores el 17 de diciembre, tras acudir a una audiencia como encausados por el delito de incumplimiento con el deber de asistencia y de la patria potestad.
Ahí se aprobó en su favor la suspensión del proceso a prueba, a cambio de que ellos aceptaran haber incurrido en la falta y se comprometieran a seguir un plan reparador elaborado por la Fiscalía, la defensa y el Patronato.
El plan incluye asistencia a terapia, cumplimiento de requisitos sanitarios establecidos por el Ministerio de Salud, además de recomendaciones médicas.
El PANI separó a las niñas de su hogar en marzo del 2009, luego de que informes hospitalarios denunciaran las malas condiciones en que vivían.
Esa medida de protección se venció en noviembre; sin embargo, los papás decidieron dejarlas en el Hogar Bíblico Roblealto hasta concluir el ciclo lectivo.
“Se ve el resultado positivo de la intervención brindada a la familia porque ellos podían egresar a las niñas al concluir las medidas de protección, pero prefirieron mantenerlas ahí”, manifestó Bayar.