La profesora Patricia Vargas imparte Ciencias de octavo año en el Colegio Técnico Profesional de Parrita. Esta clase fue el jueves. Colegios, estudiantes, jóvenes, educación.. MARIO GUEVARA
Los estudiantes de colegio que, una vez concluidos los exámenes de ampliación, solo hayan reprobado una materia tendrán ahora una tercera oportunidad.
Así lo establece un acuerdo adoptado el martes por el Consejo Superior de Educación (CSE), que estará vigente para los alumnos que se presenten a las pruebas de convocatoria del próximo mes.
Los estudiantes elegibles serán valorados con base en alguna prueba o trabajo, el cual será definido por el Comité de Evaluación del centro educativo.
El Comité también contará con la participación de los profesores del alumno, así como con la del orientador y coordinador académico, que definirán la estrategia de promoción y el docente a cargo.
La estrategia deberá implementarse dos semanas después de la última prueba de ampliación, y el estudiante tendrá otros 15 días para realizarla.
Según dijo ayer el ministro de Educación, Leonardo Garnier, la medida complementa la reforma al Reglamento de Evaluación de los Aprendizajes del 2008, que permite repetir solo las materias perdidas, mientras adelantan las demás.
“Nos estaba provocando problemas en los últimos años, en los cuales hay muchachos llevando una sola materia. Esta reforma (del 2008) tiene que ir dando pasos conforme se van sofisticando las evaluaciones”, manifestó el ministro.
“A un estudiante que se quedó en ampliación con un 1, no le va a ayudar en nada. Esto, al que le va a servir es al que le tiene que servir, que es el que está en capacidad de seguir”, agregó Garnier.
La reforma fue planteada por el el Magisterio en Acción y la Asociación de Profesores de Segunda Enseñanza (APSE).
La presidenta del APSE, Beatriz Ferreto, aseguró que no tuvo más noticias de la propuesta, sino hasta la semana pasada. No obstante, le pareció una decisión favorable.
“Hay un número importante de muchachos que repiten una sola materia y eso es un estímulo para que salgan adelante”, dijo Ferreto.
Sin embargo, dos exministros de Educación consultados por este diario externaron preocupaciones de que la modificación pudiera promover la mediocridad.
“El gran tema de la educación ha sido y sigue siendo la calidad, y creo que estas propuestas, quizás muy bien intencionadas, no contribuyen a mejorar precisamente ese tema”, afirmó Manuel Antonio Bolaños, antecesor de Garnier.
“Este tipo de medidas hay que implementarlas con mucho cuidado, pues el esfuerzo mayor que debemos hacer es en el transcurso del año para resolver los problemas de aprendizaje del alumno”, agregó Guillermo Vargas, ministro de Educación entre 1998 y el 2002.