Más de la mitad de la población laboral del país que no tiene escolaridad, no recibe el salario mínimo que establece la legislación.
De hecho, el porcentaje de trabajadores con esa condición y a quienes, además, no les llega mensualmente el pago mínimo, mostró un aumentó en dos años.
Mientras para el 2009 el 49% de esa población recibía menos paga que lo estipulado, en el 2011 la cifra subió al 53,2%, según detalla la comparación de las encuestas de hogares de esos años, la cual fue presentada ayer por el Ministerio de Trabajo.
De acuerdo con esa misma cartera, el salario mínimo vigente está en ¢219.750 mensuales.
El análisis determinó, además, que a mayor escolaridad, los patronos respetan más el ingreso mínimo del trabajador.
Así, por ejemplo, para la fuerza laboral que tiene primaria completa, solo el 27% no recibe la paga mínima. De los que cuentan con educación superior, el 6% también tiene ese problema.
Otros escenarios. En términos generales, el incumplimiento del pago del salario mínimo se redujo entre 2009 y 2011: para el primer año el 28,9% de los empresarios violaba la normativa, pero dos años después la cifra pasó a 26,5 % (2,4% menos).
“Consideramos ese logro sumamente importante en la campaña (del Ministerio para que se pague el salario mínimo) porque sabemos que por cada punto porcentual que se reduzca, hay un impacto importante en la reducción de la pobreza”, señaló la ministra de Trabajo, Sandra Piszk.
La comparación de datos señala que a las fuerzas laborales de entre 15 años y 24 años de edad, así como la mayor de 55 años, se les cometen más violaciones salariales.
Peso a todo, los números muestran mejoras significativas en el tema de remuneraciones.
Las microempresas, que siguen siendo las que más fallan en pagar el salario mínimo, pasaron del 43% al 29% en esa condición.
En cuanto a firmas de 20 o más trabajadores, actualmente solo el 16% sigue al margen de la legislación relacionada con salarios.
Por otra parte, la Región Chorotega es en donde más problemas hay para que los trabajadores reciban la paga de ley.