Las infecciones por el virus respiratorio sincitial en menores de un año no ceden.
Este virus puede causar inflamación de los bronquios (bronquiolitis), fiebre, secreción, irritación en los ojos y tos.
La atención en consulta externa por esta causa pasó de ser el 80% de todos los casos en ese servicio (alrededor de 350), hace dos semanas, a un 88% la semana pasada.
Lo anterior significa un aumento de 30 enfermos más cada día.
“El comportamiento ha estado atípico desde principio de año y se ha mantenido ascendente. La semana anterior, tuvimos un repunte en las hospitalizaciones, al punto de que eran unos 100 pacientes nuevos los que entraban y salían; es el doble de la cifra de esa misma semana en el 2011”, informó Orlando Urroz, director del Hospital Nacional de Niños (HNN).
Durante esta semana, los casos en consulta externa, internamiento y cuidados críticos reportaron una menor incidencia. Urroz aclaró que aún deben sumar a los chiquitos atendidos este viernes y sábado para dar datos concluyentes.
“En este momento, cuidados intensivos está a un 120% de su capacidad. Hay niños en las 15 camitas de la unidad y otros nueve en Emergencias e Infectología”, explicó.
Estrategia. Esta situación llevó al HNN a una nueva estrategia.
En ella se incluyeron medidas para mejorar el tratamiento, como el uso de bombas con infusores para varios fármacos a la vez, y el apoyo de terapeutas respiratorios que hacen que no sea necesario mantener a los bebés intubados por mucho tiempo.
“Tenemos niños que se complican más, como cardiópatas y chiquitos con parálisis, pero parte de la estrategia nos ha hecho tener cero muertes”, manifestó Urroz.
La estrategia viene de la mano de más ayuda humana. A partir de este lunes, más de 100 damas voluntarias y 15 profesionales jubilados de diferentes áreas de la salud, reforzarán la atención del virus.
Los voluntarios no realizarán trabajo directo con pacientes. Ellos se enfocarán en comunicar a los familiares las medidas que deben tomar para prevenir futuras infecciones, evacuar dudas y estar pendiente de sus necesidades.
También colaborarán en la distribución de comidas y el aseo de los cuartos.
“Vamos a trabajar con el programa de lavado de manos y hablaremos con los papás sobre cómo cuidar a los niños para que no vuelvan a enfermarse”, dijo Yamileth Arias, coordinadora de las Damas Voluntarias del HNN.
“Todavía estamos en época de lluvias y necesitamos ayuda de las familias para evitar que más chiquitos se enfermen”, agregó.