El fiscal a cargo de investigar las muertes de menores en la antigua Unidad Cardíaca del Hospital Nacional de Niños (HNN), está analizando los primeros cuatro dictámenes enviados por Patología Forense.
Según informó la Unidad Operativa de Dirección Funcional, por medio de la oficina de prensa del Ministerio Público, estos cuatro dictámenes fueron aportados a la investigación el pasado 23 de junio y ya se incluyeron en los expedientes.
Solo queda en trámite la entrega de un último dictamen y consultar a un perito externo al Poder Judicial (probablemente, un cardiólogo) para uno de los casos, agregó.
Las investigaciones se iniciaron hace más de un año, tras la muerte de un menor de 15 días de nacido, luego de que el cirujano a cargo de la operación supuestamente abandonó el quirófano para atender a un paciente en una clínica privada.
Sobre este caso, informó la Fiscalía, no hay ningún imputado individualizado de momento.
Actualmente, la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) mantiene suspendidos y con goce de salario a los dos cirujanos del HNN involucrados en este caso. Los médicos son de apellidos Alvarado y Campos.
Las pesquisas de la Fiscalía han topado con algunas dificultades, entre ellas, la imposibilidad de tener acceso a unos 70 expedientes de pacientes de ese centro médico infantil que sufrían problemas cardíacos y que luego fallecieron en el hospital.
Hasta principios de año, solo se había logrado rescatar seis expedientes de ese grupo.
Según comentó la directora interina del HNN, Olga Arguedas, la migración de un sistema informático a otro causó la pérdida de cientos de archivos cuya recuperación no es sencilla.
Se trata de expedientes pasivos (de pacientes fallecidos), que se deben cargar, página por página, por medio de imágenes, en un proceso que va a requerir mucho tiempo.
Proceso. La antigua Unidad Cardíaca del Hospital de Niños fue escenario de muchos problemas que desembocaron en dificultades para la atención de los menores con distintas enfermedades del corazón.
En el 2009 trascendieron cifras elevadas de mortalidad por cirugía cardíaca en ese centro. Ese año, la mortalidad fue de 16,7%, mientras que en el 2008 fue del 9,4%. La mortalidad media mundial no supera el 4%.
Además, se llegó a reconocer la existencia de un mal clima organizacional interno entre los grupos responsables de la atención de estos enfermos.
En octubre pasado se replanteó el servicio y se creó el Programa Cardiovascular Pediátrico, con el asesoramiento de Eduardo da Cruz, médico costarricense que dirige el Instituto Pediátrico de Corazón del Hospital de Niños de Colorado, en Estados Unidos.
Desde entonces se han hecho 189 operaciones, con un índice de mortalidad de 2% (cuatro muertes). Las complicaciones de los pacientes operados casi no existen y se ha reducido el promedio de estancia hospitalaria de estos pequeños pacientes.