Pérez Zeledón. Un recurso de amparo presentado por estudiantes del Colegio Académico de Concepción de Daniel Flores, en Pérez Zeledón, obligará al MEP a construirles nuevas instalaciones.
Tras ocho años de lucha por tener un edificio decente, llegó la resolución 2013006667, que obliga al Ministerio de Educación Pública (MEP) a darles un colegio nuevo.
Ya tienen el lote donde estarán las aulas que albergarán a más de 250 alumnos.
Las instalaciones se localizan en la misma comunidad, y el plan del colegio es beneficiar a más muchachos porque el nuevo edificio permitirá subir la matrícula a 350 estudiantes.
Pulso desgastante. Hasta hace poco, el colegio solo existía en el papel. Fundado en 2001 como una telesecundaria, este centro educativo pronto se fue quedando pequeño para la gran cantidad de alumnos que pedían ingresar.
En 2005, se convirtió en un colegio académico pero sin instalaciones propias.
Desde entonces, los muchachos han recibido clases en el salón comunal, que se se transforma en cuatro aulas gracias a unas divisiones móviles.
El ruido, la poca iluminación y la incomodidad obligaron a buscar cabida en el exterior y, con ayuda de vecinos y personal docente, se construyeron aulas improvisadas alrededor del salón.
Esas aulas –en donde recibirán lecciones mientras construyen el nuevo colegio–, son cajones sin ventilación, apenas tienen ventanas y cualquier aguacero amenaza con mojar a los estudiantes.
Riesgo constante. José Orozco, director del centro educativo, explicó que esta situación afecta a los estudiantes.
“Hemos tenido que ir improvisando aulas, las cuales no cumplen con las especificaciones adecuadas pero que hemos tenido que hacer porque no queda de otra. No están hechas como debe ser”, dijo el director Orozco.
El funcionario explicó que existe un riesgo permanente en la institución tanto para alumnos como para el personal.
“No son las condiciones apropiadas para el aprendizaje, aquí no se aplica la ley 7600 y tenemos algunos muchachos con necesidades. Por ejemplo, hay muchachas embarazadas; a todos ellos se les violentan los derechos; incluso, al mismo personal. Aquí tampoco hay comedor, no hay clases de informática y esto hace que ellos salgan con una pobre formación en materia de informática”, agregó el director.
Los profesores aseguran que en un colegio así es imposible brindar una educación de calidad.