Limón. El vocerío en las calles de este cantón no deja dudas; la llegada de la firma holandesa APM Terminals divide las opiniones de la sociedad limonense.
Esa empresa ganó la concesión para construir y administrar la nueva terminal de contenedores en Moín, obra que espera el banderazo de salida.
La obra contará con 80 hectáreas de patio sobre el mar y promete emplear a 800 personas en su etapa de construcción, y 300 durante la operación del muelle.
Además, la compañía estima que generará 1.500 empleos indirectos en la provincia.
No obstante, el proyecto portuario cuenta con una fuerte oposición de varios sectores de la sociedad limonense.
La posición más radical la tiene el Sindicato de Trabajadores de Japdeva (Sintrajap).
“Este tema divide porque se hizo a espaldas del pueblo y se negoció debajo de la mesa”, aseguró Ronaldo Blear, secretario general de ese gremio sindical.
Los argumentos de los sindicalistas son secundados por la Federación de Trabajadores de Limón, creada en 1977 y que agrupa a 15 organizaciones del Caribe.
“No estamos en contra de la construcción del muelle, pero no estamos de acuerdo con la exclusividad en el manejo de la carga de contenedores”, dijo Wiston Norman, vocero de la organización.
“Debería existir una competencia igualitaria entre Japdeva y APM Terminals”, añadió.
Una posición similar tiene José Luis Vásquez, exdiputado por la provincia de Limón. “Que venga APM Terminals, pero que venga a competir de manera igualitaria”, afirmó el exlegislador.
Vásquez considera que se está creando una especie de monopolio en este caso.
A favor. En la acera del frente están los sectores simpatizantes de la concesión, quienes tratan de unir esfuerzos para hacerse sentir.
“Yo apoyo a APM Terminals porque es una empresa más que viene a invertir”, indicó Emos Davis, director de la Comunidad Portuaria del Caribe (Comport). Davis sostiene que los limonenses están en capacidad de competir.
“Este es un proyecto indispensable para el desarrollo de Limón y sería gravísimo que no se ejecute”, dijo Guillermo Rodríguez, director de la Agencia para el Desarrollo de Limón. “Básicamente, es el sindicato de Japdeva el único que se opone”, enfatizó.
Por su parte, APM Terminals manifiesta que respeta los diferentes criterios tanto a favor como en su contra.
“A veces malinterpretamos la división. Por lo que nosotros hemos estado investigando, hay un 85 % de personas a favor de la terminal de contenedores”, aseguró Rogelio Douglas, gerente de APM Terminals en Costa Rica.
Douglas cree que sí hace falta que las personas a favor salgan a demostrar su simpatía por el proyecto portuario en Limón.
“Los sectores a favor no tienen experiencia para salir a manifestarse de la manera en la que lo hace la oposición, pero deberían hacerlo”, concluyó.
Desarrollo. También existen posiciones más neutrales.
Por ejemplo, el decano del Colegio Universitario de Limón, Desiderio Arias, considera que los limonenses deben estar preparados ante las opciones de desarrollo.
“Estamos a favor de todo lo que traiga desarrollo a la provincia. Sin embargo, hay que revisar muy bien la letra menuda de estas iniciativas”, dijo Arias.
El académico explicó que el Colegio Universitario de Limón debe contribuir, como institución educativa, a que las iniciativas de desarrollo se concreten.
Actualmente, esta institución educativa ofrece en sus recintos la carrera de Operación en Logística Portuaria y está por abrir dos carreras más afines en los próximos meses.