Un proyecto de ley, que se encuentra en la Comisión de Ambiente de la Asamblea Legislativa, le daría el monopolio del gas natural licuado a la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope).
La iniciativa fue presentada por cinco diputados del Partido Acción Ciudadana (PAC), con la intención de salvaguardar este hidrocarburo al considerar que un vacío legal podría dejarlo fuera del control estatal. Si la reforma de ley fructifica, se crearía un monopolio estatal de gas natural licuado, tal como existe con otros combustibles.
La ley 7.356 define el monopolio estatal para la “importación, refinación y distribución al mayoreo de petróleo crudo y sus derivados, que comprenden combustibles, asfaltos y naftas”. Sin embargo, no especifica el gas natural licuado.
“Para aclarar el tema, ya que está en boga y parece que no hubiera un marco regulatorio, lo más conveniente es hacerlo de este modo”, explicó la diputada Jeannette Ruiz, una de las proponentes.
El texto incluiría, explícitamente, “la importación, transformación y distribución al mayoreo de gas natural licuado”.
La misma legislación, en un artículo no alterado por la reforma, apunta que el Estado otorga estos monopolios a Recope, por lo que la empresa estatal quedaría también en control del gas en Costa Rica.
Ruiz aclaró que si bien la administración de Recope fue cuestionada por el manejo de la refinería con China y la calidad de los combustibles, la refinadora como tal “es una empresa que siempre hay que defender”. Por eso la respaldan. El gas natural licuado no es lo mismo que el gas licuado de petróleo, que sí queda más claramente cubierto por la ley actual.
Mesura. René Castro, jerarca del ministerio de Ambiente, Energía y Mares (Minae), indicó que la discusión sobre el gas natural debe darse ampliamente, pues apenas están analizando la situación nacional. Por esto prefirió no emitir criterio sobre la reforma.
Castro, quien es vicepresidente de Recope, sostuvo que la refinadora no tendrá la infraestructura para ofrecer gas natural al menos durante los próximos cinco años.
Actualmente, el Minae debe responder a un recurso contencioso administrativo de una compañía comercializadora de hidrocarburos que desea abrir el mercado de ese tipo de combustible.
El hidrocarburo es un 30% menos contaminante que los derivados del petróleo.
Además, es cuatro veces más barato que el crudo y seis veces más económico que la gasolina.