Servicio Civil se niega a avalar el ascenso de Gloria Valerín

En diciembre, el Directorio del Congreso autorizó la promoción de la funcionaria , quien pasó de la Dirección del Departamento de Servicios Técnicos a la jefatura de la División Legislativa, el segundo puesto en importancia de la Administración parlamentaria, solo por debajo del director ejecutivo.

“Esta Dirección General no tiene competencia para efectuar lo solicitado, por lo que se devuelven los antecedentes remitidos, para que los órganos correspondientes de la Asamblea Legislativa ejerzan la competencia que en derecho les corresponde”, señala el oficio DG-138-2015, del 10 de marzo.

Esa fue parte de la respuesta al director de Recursos Humanos del Congreso, Hugo Cascante, quien pidió que fuera ese órgano el que avalara el ascenso.

El 20 de enero, Cascante le informó al Directorio de que él se opone a firmar ese trámite pues la Ley de Personal de la Asamblea establece como mandato hacer concurso para asignar cualquier plaza disponible.

La promoción de Valerín ya tiene el visto bueno del director ejecutivo, Antonio Ayales, y del director de la División Administrativa, Pedro Solano.

El Directorio del Congreso aseguraba que contaba con el aval del Servicio Civil para el procedimiento; sin embargo, en la respuesta a Cascante, esa Dirección niega haber emitido criterio “favorable o desfavorable” para el caso concreto de Valerín.

“Se le sugiere al consultante que, si el caso en cuestión se ajusta a la normativa descrita, esa institución deberá proceder conforme con las competencias que posee para hacerlo”, dice la nota firmada por el director general del Servicio Civil, Hernán Rojas.

Ante esa posición, Hugo Cascante solicitó un nuevo criterio a ese órgano para esclarecer los pasos siguientes.

“La ley no prevé el ascenso directo (...). Yo nunca he estado de acuerdo; he dicho que esto no procede”, insistió Cascante.

Por su parte, Gloria Valerín les resta importancia al criterio del Servicio Civil y a las objeciones que ha puesto Cascante a su promoción laboral.

Ella aduce que el Tribunal Contencioso-Administrativo ya emitió un fallo a su favor, que respaldaría su ascenso automático.

“Yo soy directora (de la División Legislativa) en propiedad. A mí no me importa si hay o no un papel que diga eso: es asunto de ellos. Mientras a mí no me ocasione ningún problema, yo estoy tranquila”, indicó Valerín.

La legalidad de los ascensos en propiedad en el Congreso se estudia en la Sala IV ante la queja de dos funcionarias que alegan un trato diferenciado pues ellas sí deben concursar por las plazas que ocupan interinamente, pese a estar en las mismas condiciones de Valerín.