EscucharEl presidente de la República, Luis Guillermo Solís, afirmó esta mañana que durante su gira por Europa expuso su preocupación por el apoyo militar que Rusia otorga a Nicaragua.
"Nos preocupa mucho la presencia reiterada de altos jerarcas de gobierno ruso en Nicaragua, incluido el ministro de la defensa, así como la presencia de naves artilladas de la armada rusa en aguas de ese país", dijo Solís ante consulta de la prensa esta mañana en el Parque Nacional, en San José.
El mandatario se refirió a la cercanía de Nicaragua con Rusia que en los últimos meses se ha traducido en un fuerte apoyo militar, y que ha tenido al Gobierno de Solís al pendiente.
Un mes atrás, el comandante en jefe del Ejército de Nicaragua, general Julio César Avilés, se reunió con el ministro de Defensa ruso, el general Serguei Shoigú, y el primer viceministro de Defensa y jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia, en el marco de la celebración del del 70 aniversario de la "Victoria en la Gran Guerra Patria" celebrada en Moscú el 9 de mayo.
"Explicamos (a autoridades europeas) que esto nosotros lo colocamos en un marco político mayor, en la cuenca del Caribe, que sabemos que no hay una hipótesis de conflicto militar con Costa Rica, pero que era ese, así como el fortalecimiento militar de Nicaragua, son temas que nos preocupan", dijo Solís.
Esta no es la primera vez en que Costa Rica externa su preocupación por la compra de armamento de Nicaragua a Rusia.
A finales de marzo el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, el canciller Manuel González expresó la preocupación de Costa Rica por la carrera armamentista que Nicaragua desarrolla con el apoyo de Rusia.
González lo expresó en una reunión entre los cancilleres del Sistema de Integración Centroaméricana (SICA) y el de la Federación Rusa, celebrada en Guatemala.
En esa oportunidad, como ahora, a Costa Rica le generó preocupación el plan de Nicaragua de comprar aviones MiG-29 a Rusia con el argumento de que los usaría para combatir el narcotráfico. Los cazas MiG-29 son el caballo de batalla de la Fuerza Aérea rusa, desde mediados de los ochenta.
En los últimos meses también se ha dado un acercamiento naval, situación que inquieta en la región.
