El rico cantón de Belén y la cuna del Partido Acción Ciudadana (PAC), Montes de Oca, encabezan el grupo de cinco territorios donde esta agrupación hará yunta con Frente Amplio (FA) para las elecciones municipales del 7 de febrero del 2016.
El partido que arrasó en los comicios presidenciales del 2014 ratificó ayer las coaliciones para pelear por las municipalidades de Belén y Montes de Oca, pero también de Tibás, Guatuso y San Isidro de Heredia.
El máximo órgano del PAC, su asamblea nacional, votó ayer por amplia mayoría, a favor de los acuerdos logrados por sus asambleístas a escala cantonal con FA y, en algunos casos, con otra fuerza local. Sin embargo, también hubo críticas de unos pocos dirigentes.
La reunión de la Asamblea Nacional del PAC, que duró unas seis horas hasta que se rompió el cuórum, logró dejar ratificadas las alianzas a pesar de desavenencias del sector más conservador, ligado al fundador Ottón Solís, y de dudas procedimentales para ratificar candidaturas en otros cantones.
Las críticas de los asambleístas Sadie Bravo y Fernando Jiménez, entre otros, apuntaron a la supuesta ventaja que el PAC otorga al FA en estas coaliciones.
“Yo creo que nos fuimos pollos en estas coaliciones (...). Difícilmente ganemos la alcaldía en las circunstancias en que estamos, pero les dimos el primer lugar de regidor al FA”, lamentó Jiménez sobre una generalidad de las coaliciones acordadas, tanto las cinco aprobadas ayer como otras posibles alianzas aún pendientes.
Con él coincidió Bravo: “Yo creía que estábamos en Gobierno y habíamos ganado las elecciones sobradamente”, dijo con algo de sarcasmo la exdiputada.
A contrapelo, otros asambleístas, como José Ricardo Sánchez, pidieron respetar las decisiones de las autoridades locales, que conocen las dinámicas y circunstancias de cada territorio.
Jiménez y Bravo pasaron a ser los disidentes frecuentes en la sesión plenaria de ayer, pues, además de objetar la mayoría de coaliciones, fueron los primeros en exigir que la Asamblea Nacional discutiera el acuerdo que la cúpula del PAC firmó con Frente Amplio y un grupo de sindicatos, el 29 de junio. Criticaron que no hubo transparencia en la negociación de ese acuerdo, suscrito por la presidenta de la agrupación, Margarita Bolaños, y por el jefe de sus diputados, Marco Redondo.
Sin embargo, la mayoría de los asambleístas prefirió dejar para el final el debate sobre el acuerdo que “jala al PAC hacia la izquierda”, según Sadie Bravo.
Al final no se discutió formalmente, pues el cuórum se rompió antes de llegar a ese punto.
Aun así, Marco Redondo, único diputado presente en esta jornada, se quedó para explicar cómo negociaron con el FA, ya fuera de la formalidad de la asamblea.
Esta explicación, sin embargo, tampoco pudo culminar, pues Fernando Jiménez y Sadie Bravo, ahora sí con más apoyo, interrumpieron para cuestionar por qué nunca fueron enterados de tales negociaciones.
En la discusión terció Margarita Bolaños y pidió detenerla para que los periodistas, a solo cinco metros, no los reportaran al público de manera “tergiversada”.
Así acabó la jornada con la que el órgano de más autoridad del PAC intentó avanzar en la preparación para las elecciones municipales.
Quedaron en volverse a reunir el 26 de julio, con la esperanza de tener ya claridad jurídica sobre la forma de ratificar todos los acuerdos cantonales.