San José
El ministro de Comunicación, Mauricio Herrera, afirmó que la ciudadanía todavía no ha dimensionado la importancia de la visita que realizará a Cuba el presidente, Luis Guillermo Solís, y se deja llevar por la "filtración irresponsable" de la lista de 31 funcionarios que acompañarán al mandatario, con recursos públicos.
"Lamentablemente el costarricense de a pie no ha dimensionado la importancia del viaje a Cuba, porque prevalece la idea de que el funcionario público que se monta en un avión va a pasear, cuando, en realidad, el viaje a Cuba tiene un objetivo claro: dar la última puntada al restablecimiento pleno de relaciones diplomáticas con Cuba", dijo, parafraseando al presidente.
Solís viajará entre el 13 y 15 de diciembre con la primera dama, Mercedes Peñas; cinco ministros, cinco diputados de cinco partidos diferentes, el director de la Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS), Mariano Figueres; y 15 funcionarios más.
"Aunque el monto que pueda salir de allí no le podría parecer al costarricense de a pie, lo cierto es que dentro de la globalidad de los gastos de un gobierno no tiene un impacto significativo; es un viaje con objetivos claros y de interés de las sociedad y del Estado", comentó Herrera respecto del costo del periplo por tierras cubanas.
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Pese a la crítica, el ministro dijo que puede entender por qué a la población le cuesta entender el tamaño de la delegación presidencial. Insistió en que la divulgación de la lista, a través de los medios de comunicación, incidió en la opinión pública.
"La filtración es irresponsable porque, al circular solo la lista sin las explicaciones e información que recibieron los invitados en una reunión privada, la población recibe una información descontextualizada y la impresión de que el viaje es por turismo cuando, en realidad, consta una agenda oficial muy intensa y no tiene nada que ver con actividad recreativa alguna, ni mucho menos", sostuvo.
"Si el gobierno tuvo la deferencia de compartir con los invitados la lista (de viajantes), se esperaba una deferencia similar de esas personas, de esperarse a que el Gobierno diera la información oficial y contextualizada. Es lo menos que se esperaría", reclamó el encargado de la comunicación del Gobierno quien, empero, ve con preocupación la sensación de despilfarro de recursos públicos que se creó en torno al viaje.
La Nación consultó a Herrera si igualmente catalogaría de 'filtración irresponsable' la información sobre la comitiva si se hubiera producido en un gobierno de Liberación Nacional (PLN) o de la Unidad Social Cristiana (PUSC), a lo que contestó que no se referiría 'situaciones hipotéticas'.
"Es absurdo pensar que el Gobierno pretendía mantener oculta la lista de invitados. La íbamos a dar a conocer en una conferencia o a través de un comunicado de prensa días antes del viaje, donde se explicarían los pormenores de lo que irá a hacer cada funcionario invitado, pues cada uno va con una función específica", justificó.
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En cuanto a los costos del viaje, igual que el ministro de la Presidencia, Sergio Alfaro, y que el Canciller, Manuel González, Herrera dijo no tener a mano un estimado del presupuesto que consumirá el viaje de los 31 funcionarios.
Sin embargo, se comprometió a brindar a La Nación una cifra estimada en el transcurso de la tarde de este miércoles.