Costa Rica amaneció hoy bajo estrictas medidas para garantizar la seguridad del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, durante las 22 horas que estará en suelo costarricense, a partir de las 2 p. m.
Que la gente pueda sentarse a ver pasar a Obama, no es algo previsto en el operativo de seguridad.
En San José, la Fuerza Pública cercará 200 metros a la redonda los sitios en los cuales el mandatario estadounidense se reunirá con la presidenta Laura Chinchilla, con sus pares centroamericanos y con empresarios de la región.
Estos cercos impedirán al público acceder a la Cancillería, al Centro Nacional de Cultura (Cenac) y al Teatro Nacional. Mañana, le tocará el turno a la Antigua Aduana.
Así lo informó Nils Ching, subdirector de la Fuerza Pública, quien agregó ayer que, desde esta madrugada, se cerrará el paseo Colón y la avenida segunda, lo que obligará a mover paradas de buses.
Donde haya perímetros de seguridad, solo los vecinos podrán pasar. Ching explicó que, previamente, se identificó a los habitantes.
A ello se suma el hecho de que el Gobierno decretó hoy asueto para los funcionarios públicos en siete cantones: San José, Alajuela, Belén, Escazú, Goicoechea, Montes de Oca y Curridabat.
En entrevista con radio ADN 90.7, el viceministro de la Presidencia, Mauricio Boraschi, dijo que helicópteros de la Policía costarricense y de la seguridad estadounidense aplicarán una vigilancia aérea.
El aeropuerto Juan Santamaría será reservado una hora y media para recibir al Air Force One y Tránsito cerrará intermitentemente la pista General Cañas y la ruta 27 para facilitar el traslado de Obama y sus homólogos, a San José y al aeropuerto, entre la tarde de hoy y la mañana del sábado.
Desde ayer, al Cenac –donde Obama tendrá hoy una conferencia de prensa– no se podía entrar, había policías cerca de Cancillería (donde será el recibimiento oficial a las 3:35 p. m.) y la Comisión de Emergencias declaró “alerta verde preventiva”.
Esta noche, en el Teatro Nacional Obama tendrá una reunión y cena de trabajo con los presidentes del Sistema de Integración Centroamericana (SICA).
Boraschi agregó que no tolerarán que protestas contra la llegada de Obama terminen en violencia, como ocurrió el pasado 1.° de mayo en la Asamblea Legislativa.
Alegó que monitorean a un grupo “pequeño” que usa explosivos de fabricación casera.