Luis Guillermo Solís frunció el ceño cuando La Nación le pidió definir su relación con Víctor Morales Zapata, su diputado más cercano en el oficialista Acción Ciudadana (PAC).
Solís ha reconocido en el pasado su cercanía con Morales.
El mandatario arrugó aún más el entrecejo cuando se le explicó que la pregunta la provocó el fundador del PAC, Ottón Solís –crítico con su gestión presidencial–, al afirmar que Morales tiene poder porque fue el mandatario quien se lo otorgó, cuando lo nombró su “embajador” en el Parlamento.
El gobernante intentó desarmar esa tesis. Se esforzó también por recalcar que Morales, el polémico diputado que ha promovido un grupo de influencia para tomar el control del Congreso, no es su “otro yo”.
En las siguientes líneas, se desarrolla el intrincado tema.
¿Usted considera que tiene los interlocutores adecuados en la Asamblea Legislativa?
Tengo los que tengo. En esto de la política, es el arte de lo posible, y hay gente con mucha experiencia, con muy buena voluntad política por construir.
Ottón Solís dice que usted empoderó a Víctor Morales Zapata, que es su embajador en la Asamblea y que no es el mejor de los embajadores. ¿Es eso tan cierto? ¿Sigue siendo su hombre de confianza en el Congreso?
Don Víctor Morales Zapata es un compañero que estuvo conmigo durante la campaña política.
”Es una persona que tiene un liderazgo propio. No es mi embajador ni mi enviado; yo no me reúno con él aquí en Casa Presidencial para articular a los diferentes sectores y grupos de forma permanente, o regular. Cuando conversamos, me explica sus puntos de vista. A veces estamos de acuerdo; otras veces no, pero se ha creado en el imaginario de la Asamblea una suerte de imagen de Víctor Hugo como mi alter ego , y eso yo no lo siento así. Creo que él tampoco, y me parece que tiene suficientes méritos en el tanto que es un líder político para ejercer esa influencia como lo hace, y creo que lo hace con bastante éxito, a juzgar por lo que logra, pero no lo hace mandado por el Gobierno y, ciertamente, no por mí.
Pero coordinan...
No necesariamente. A veces, nos hemos puesto de acuerdo sobre algunos temas, donde ha jugado un papel muy importante, pero también lo han jugado otros diputados.
”Por ejemplo, en el tema del Código Procesal Laboral, ahí Víctor Hugo jugó un papel clave, a lo largo de muchos años, mucho antes de ser diputado, cuando trabajaba desde el movimiento social. Entonces, creo que hay un tema en donde no se comporta, desde el punto de vista de proyectos, diferente de otros diputados”.
Entonces, cuando habla Morales Zapata, ¿no está hablando el presidente?
No, yo no hablo por Víctor Hugo. La palabra del presidente la ejerce el presidente. Tampoco la habla don Sergio (Alfaro, ministro de la Presidencia), excepto cuando expresamente lo dice. Yo tengo que administrar cuidadosamente mis palabras y mis silencios (...). Víctor Hugo Morales Zapata no es mi embajador, ni mi representante, ni mi vicario en la Asamblea Legislativa. Esa es una tesis que don Ottón mantiene a rajatabla y se la cree absolutamente, pero esa es la opinión de don Ottón.