En un acto que duró cerca de una hora, el presidente electo, Luis Guillermo Solís, dio a conocer ayer al último grupo de ministros, viceministros y presidentes ejecutivos que lo apoyarán en el gabinete a partir del jueves 8 de mayo.
El mandatario electo enfatizó en que su equipo es técnico y no hay “pegabanderas”.
“Esto no es un... lo digo, quizá no debería decirlo para no irrespetar otros espacios y gabinetes, este no es un gabinete de pegabanderas, es un gabinete de gente que sabe y de gente de muy buena calidad”, afirmó Solís, quien a partir del jueves se convertirá en el presidente número 48 del país.
La actividad, en que anunció el último bloque de 28 nombres de servidores públicos, se llevó a cabo en el Auditorio Nacional, en San José.
Para Solís, de 56 años y politólogo de profesión, su equipo de gobierno tiene consistencia técnica. En los currículos de los futuros jerarcas se incluyen desde doctores en derecho hasta un sacerdote.
“Es un gabinete muy técnico (...). Son personas que están profesionalmente capacitadas para ejercer los cargos que ostentan. Esto es una primera consideración importante”, recalcó Solís.
Entre los nombramientos dados a conocer ayer resalta el del nuevo ministro de Vivienda, Rosendo Pujol Mesalles, un académico de la Universidad de Costa Rica (UCR), doctor en Planificación Urbana y Regional de la Universidad de California, en Berkeley, de 62 años, quien fundó y dirigió el Programa de Investigación en Desarrollo Urbano Sostenible.
También dio a conocer a la nueva ministra de Justicia y Paz, Cristina Ramírez Chavarría, de 43 años, doctora con especialidad en Derecho Constitucional por la Universidad Escuela Libre de Derecho, y quien se desempeñó como jefa del área jurídica del Departamento de Servicios Técnicos del Congreso.
Para acabar con la cartera de ministros pendientes, presentó a Gisela Kopper Arguedas, una ingeniera de alimentos de 56 años con un máster en Tecnología de Alimento por la Universidad Estatal de Iowa y directora del Centro Nacional de Ciencia y Tecnología de Alimentos de la UCR.
Caras nuevas y detalles. La mayoría de los nombres anunciados por Solís son desconocidos en cargos de alto vuelo de la función pública.
Aunque siempre hay una excepción. Se trata de una nueva figura de gobiernos de la Unidad Social Cristiana que aparece en escena.
Ella es María Fullmen Salazar, quien fuera viceministra de Seguridad durante las administraciones de Miguel Ángel Rodríguez (1998-2002) y en la administración de Abel Pacheco (2002-2006).
Otro detalle fue el nombramiento del sacerdote católico Gustavo Meneses Castro como presidente del Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (Incopesca).
El cura, de 47 años, es oriundo de Alajuela y actualmente se desempeña como párroco de Jicaral, en Puntarenas. Meneses está ligado a grupos defensores de los pescadores artesanales.
Pero la convocatoria de Solís no llenó todas las plazas pendientes en el Ejecutivo.
El mandatario electo no anunció la nueva cabeza de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), ni al nuevo director de la Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS).
En este último caso, Solís dijo que aún no está listo el nombre pues hay ajustes previos que están pendientes.
El ministro de la Presidencia designado, Melvin Jiménez, reiteró que en el caso de la DIS, la idea es renovarla, y no eliminarla, por lo que aún deben afinar detalles.
Mientras tanto, y con tono relajado, el presidente electo dijo que, por lo pronto, él será la cabeza del único cuerpo policial y de seguridad adscrito a la Presidencia.