A Jeremmy Líos Martínez fue su mamá quien le avisó que este martes se vencía el plazo para solicitar la cédula, documento que le otorgará el derecho a votar en las elecciones presidenciales del 4 de febrero.
El muchacho, quien cumple 18 años este mismo mes, aprovechó los horarios ampliados del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) e hizo las largas de filas junto a otros cientos de jóvenes que corrieron a sacar su documento de identidad.
“Para mí es un derecho y también es un deber poder emitir mi voto. Muchas personas sufren en otros países porque no pueden elegir presidente; yo como joven tengo el deber de que mi país siga creciendo”, dijo una muchacha identificada como Bianca, quien dijo que se informó por las noticias del vencimiento del periodo para hacer la gestión.
Desde junio, el TSE estimó en 165.000 los nuevos votantes para el 2018. Ellos son los que cumplan 18 años incluso el mismo día de los comicios.
De ese grupo, para esta semana, aún faltaban 38.000 de tramitar su documento.
Por esa razón, el Tribunal abrió sus oficinas centrales y las 32 sedes centrales, incluso el fin de semana pasado.
No obstante, ayer por la tarde, al filo del cierre del padrón, las instalaciones en San José estaban abarrotadas.
“Una compañera me avisó que hasta hoy había tiempo. Yo quiero votar, porque creo que un voto puede hacer la diferencia”, expresó Christian Corella Ortiz.
Hasta agosto, el padrón lo conformaban 3,3 millones de votantes; de los cuales la mayoría son mujeres, aunque con una mínima diferencia con respecto a los hombres.
Fotos: Albert Marín