Las 84 horas transcurridas desde las 6 p. m., del domingo 2 de febrero y el medio día del jueves anterior fueron de análisis, revisión y autocrítica para el aspirante liberacionista, Johnny Araya Monge.
Al mismo tiempo, se formula la estrategia de campaña para la segunda vuelta, la cual, asegura, será un empezar de nuevo.
Habrá cambios de forma y fondo. Buscará un mensaje que logre calar en el electorado. Apostará más a las redes sociales que a la propaganda pagada, y al voluntariado, antes que a las contrataciones. Así lo dijo a La Nación este jueves, antes de tomar un descanso .
¿Tres aciertos de la reciente campaña electoral?
(Se ríe). Ya veo por donde viene. Tres aciertos y tres errores (...) No quisiera ponerme a decir en esto nos equivocamos y en esto acertamos. Estamos haciendo una evaluación programa por programa, y será producto de ese análisis que vamos a reconocer áreas débiles desde el punto de vista organizativo, de comunicación o mensaje.
Pero ¿ni siquiera le he preguntado en qué falló?
(Ríe). No, no, pero yo conozco la mecánica. Conozco la lógica. La pregunta segunda es esa. Y, de los errores de nuestra campaña que hablen otros.
De cara a la segunda vuelta. ¿Cuáles cree que deben ser los ajustes por hacer?
Tenemos que hacer un ajuste en la organización territorial que va a tener que responder mucho a los resultados. Ya empecé a ver números y resultados y es fácil ver en qué lugares pesaron los números y resultados y los lugares donde la organización fue muy buena, pero pesaron otros factores.
¿Falló la maquinaria del PLN?
En algunos lugares falló. Estamos evaluando.
¿Por desmotivación?
No creo que por desmotivación. No se logró integración plena de toda la dirigencia. No estuvo la organización al 100%.
El PLN está muy bien en las zonas costeras y más alejadas, pero no así en el centro del país. ¿Como lo van a resolver si en el centro del país la ‘maquinaria’ pesa menos ?
Ahí va a tener que ver con un tema de mensaje. Nos ha faltado lograr más claridad en el mensaje sobre nuestra capacidad y voluntad de hacer rectificaciones. Eso es un reconocimiento de una debilidad que debemos superar.
¿Tiene claro cuál sería ese nuevo estandarte de campaña?
Estamos en ese proceso (...). Aquí estamos ante una nueva campaña. Tenemos un gran reto que es conquistar a muchos sectores de la meseta central, de clase media, de jóvenes. Gente que se mueve más por redes sociales que por publicidad o por organización partidaria.
¿Faltó sacarle un poco más de provecho a todo este bagaje que permiten las redes sociales?
Posiblemente. Ahí también estamos haciendo una evaluación y entendemos el papel estratégico de las redes sociales en esta campaña. Hoy por hoy, para muchos son más importantes las redes sociales que la publicidad.
¿Adelantará más nombres de un eventual gabinete?
He adelantado únicamente dos nombres de ministros y no hay intención de dar más.
¿Cómo van a resolver el tema financiero?
Estamos haciendo un replanteamiento presupuestario, ajustándonos a circunstancias muchísimo más restringidas en recursos. Una estructura mucho más liviana, basada en el voluntariado. Tenemos que redoblar esfuerzos para hacer una recolección de recursos.
¿Se complica buscar plata cuando los resultados de la primera ronda son adversos?
No creo que sea una situación insalvable. Hemos visto a otros partidos con mucho menos opciones recoger recursos y salir adelante. Nosotros estamos prácticamente empatados (con el PAC), en una situación de empate; en un uno contra uno. Tenemos grandes posibilidades de alcanzar una victoria y hay gente que va a apostar a nuestra propuesta.
Siente que algunos liberacionistas lo han dejado solo ahora que las cosas no andan bien?
No. El PLN está anímicamente preparado para esta pelea. Hemos venido hablando con gente de todo el país que me ha dado apoyo, no creo que me dejaran solo.
El presidente del PLN ha culpado a este Gobierno del fracaso del partido. ¿Usted comparte esto con don Bernal Jiménez?.
No, no. Ayer (miércoles) él hizo una aclaración de que habían sido descontextualizadas sus declaraciones. Sí ha tenido un efecto porque que hay un sector de la población insatisfecha con el Gobierno y no hay duda de que eso pesa. Pero ponerse a echarle la culpa al Gobierno del resultado, creo que no.
¿Se juega la vida el PLN?
No se juega la vida, claro que no. El PLN ha mostrado una gran fortaleza y un gran arraigo. Es un partido con 62 años, de los de más larga vida en Costa Rica y en América Latina.
Podríamos estar ante un escenario del 2002. Una segunda vuelta; un candidato que sorprende y obtiene mayor respaldo.
No. Son circunstancias distintas y los actores son distintos. Ni yo soy Rolando Araya ni Luis Guillermo es Abel Pacheco. Los resultados en aquella segunda ronda fueron diferentes. Abel Pacheco ganó con un 8% y ahora hay casi un empate. No es comparable una situación con la otra.
¿Cómo ve a Luis Gmo. Solís?
Como un digno rival. El representa un partido con el que tenemos una serie de diferencias. Vamos a contrastar nuestras diferencias con lo que ha sido el historial del PAC en el país y lo que ha sido el liderazgo y trayectoria de Luis Guillermo Solís.
”Creo que aquí cabe preguntarse lo que cada quien ha hecho por Costa Rica”.
¿Qué ventajas tiene sobre él?
Yo puedo mostrarle al país una experiencia política y ejecutiva muchísimo más abundante.
¿Por qué cree que en la propia capital, donde ha tenido presencia tanto tiempo, la gente no le reconoce esa experiencia?
Porque ya no era un fenómeno local. No estaba en juego mi gestión como alcalde. Hay un comportamiento de todas las áreas urbanas que votaron de esa manera. Eso trascendía la valoración de mi gestión como alcalde.
¿Ha llamado a don Luis Guillermo y los otros candidatos
No
¿Por qué?
Porque he querido dar tiempo a que las cosas se asienten y hacer contacto para conversar.
¿Habrá debates?
Sí, pero creo que deben haber menos debates. Debe darse tiempo para visitar las comunidades. Yo pretendo darle vuelta al país nuevamente en estos 60 días y empiezo la semana entrante.
Considerando el corto tiempo para la transición al nuevo gobierno, se reunirá con la presidenta Laura Chinchilla.
No está planeado, pero evidentemente sí tendremos contacto con la presidenta y estaremos muy atentos a lo que estará ocurriendo en el país en estos dos meses, y en la Asamblea Legislativa.