La distancia con Rodrigo Arias quedó manifiesta en la entrevista publicada ayer por este diario y Johnny Araya no la niega. Es un desamor correspondido.
El candidato oficialista, sin embargo, asegura que las críticas de Arias solo lo representan a él y están motivadas por la “frustración” de haber tenido que retirarse de la contienda en enero, golpeado por las encuestas.
Ayer jueves esperó para reaccionar y, tras dedicar la mañana a una reunión con diputados del PASE que lo apoyan, respondió así a una de las voces más fuertes de Liberación Nacional.
¿Cómo explica las críticas de Rodrigo Arias a usted?
Me parece que, por lo poco que le he escuchado y por conversaciones de amigos, pienso que Rodrigo Arias aún no ha asimilado el hecho de que él no logró ser el candidato del Partido Liberación Nacional . Se siente en sus palabras una dosis de frustración, de resentimiento y hasta una dosis de amargura. No termina de aceptar que las circunstancias no lo favorecieron. Había un desencuentro grande del país con él, caso contrario a mi candidatura, favorecida por una mayoría de los liberacionistas y los costarricenses.
¿Esa distancia que él señala la ve usted también? ¿Es tanta?
Bueno, lo que hay es una contradicción en sus declaraciones. Por un lado me dice que no me conoce ninguna idea, como titularon ustedes el reportaje, y por otro dice que tiene diferencias ideológicas conmigo. Es una contradicción, porque uno no tiene diferencias ideológicas con alguien a quien no le conoce ideas. Evidentemente, él sí me conoce ideas y sí tiene diferencias conmigo.
¿Cuáles diferencias?
Yo he hablado de un nuevo PLN, más comprometido con tesis sociales que hemos abandonado, más socialdemócrata. Eso significa tener claro que el desarrollo económico debe ir de la mano con el social. Este nuevo Liberación Nacional debe partir de una autocrítica. Primero en lo ético y moral, porque los dos últimos gobiernos han tenido problemas en eso; no voy a señalar casos concretos, pero es evidente. También he hecho una autocrítica porque a pesar de haber tenido gobiernos del PLN, en Costa Rica ha crecido la desigualdad como en ningún otro país de América Latina, en los últimos 10 años. Hemos estado enfocados en el éxito de un modelo económico y hemos abandonado lo social. Y en eso, claro, que hay una clara diferencia.
Denos un ejemplo puntual.
La propuesta en energía. La semana pasada hice 12 propuestas que fueron aplaudidas por gente cercana a Rodrigo Arias. He dicho que son necesarias leyes para ordenar el mercado eléctrico, pero teniendo claro que el ICE debe ser actor principal. Rodrigo Arias ha propiciado un modelo que podría acabar por desmantelar al ICE.
”Otro ejemplo: él defendió a ultranza la concesión de la carretera San Ramón-San José y yo me pronuncié en contra y presenté una alternativa con un menor costo”.
¿Está don Rodrigo fuera del partido en la práctica?
Él está fuera de la campaña y no veo que participe. Cuando él se retiró, en enero, dijo que iba a atender sus negocios privados y que no iba a participar. Yo entendí con claridad el mensaje y lo respeto.
¿Es usted antiarista?
No, yo no soy antinada.
Pero ser proalgo siempre implica ser antialgo, ¿no?
Por naturaleza siempre quiero ver lo positivo y constructivo. He planteado prioridades e ideas concretas, algunas polémicas, como el del examen opcional de bachillerato. He hablado de un gobierno de unidad nacional; me he convertido en factor de unidad en el PLN y he logrado aglutinar incluso al arismo, en términos de lo que significó esa tendencia, de lo que significa.
¿De lo que significó?
De lo que significa, corregí inmediatamente. Le decía que obtuve apoyo de la gente de Antonio Álvarez Desanti, quienes apoyaban a José María Figueres y me dio el apoyo Fernando Berrocal. Y casi todos los sectores que apoyaban a Rodrigo Arias, ahora me apoyan. Sí me llama la atención esa visión clasista de la política, de decir que hay un arismo de altura y uno comunal. Es una visión muy clasista de la política. Yo me siento orgulloso del apoyo de sectores que estaban con él; diputados, alcaldes, líderes comunales, líderes empresariales... La inmensa mayoría no comparte esa forma de descalificar al que fue su rival con tanta amargura.
Dice él que buscan puestos. Y no sería raro en la política.
Eso es un menosprecio a la gente. La inmensa mayoría que está conmigo no está por puestos. Él está menospreciando a quienes tomaron la decisión de apoyarme porque son liberacionistas y aceptan las reglas de juego de la democracia. Él cita cuatro nombres de lo que llama “arismo de altura” y tres están incorporados conmigo: Alex Sibaja, José León Sibaja y ya recibí a Francisco Morales. Por eso le digo que esta posición de él expresa una gran frustración.
¿Cree que es distinta la posición de don Óscar también?
Bueno, él lo involucra en las diferencias ideológicas, pero no me consta. He hablado con él dos veces por teléfono y no descarto una reunión. Lo respeto como expresidente y Nobel de la Paz. Aspiraré a que me apoye como lo hice yo con él, pero desconozco qué tanto comparte las afirmaciones de su hermano, quien hoy (ayer) hasta refleja resentimiento con él, me parece.
Dice Rodrigo Arias que teme un PLN más estatista.
Yo no pienso en estatismo. Sí creo en un Estado fuerte y rector, pero no un Estado grande. Me siento orgulloso de decirle que soy el político costarricense que más ha insistido con el tema de la equidad.
¿Y qué ha hecho por ello?
Diay, ahora yo no soy presidente, pero estamos analizando el tema con distintos círculos para impulsar un modelo más equitativo.
Para ello debería antes ganar las elecciones. ¿Las críticas de Arias le ayudan a ello o no?
No sé. Solo le digo que no me siento perjudicado por las declaraciones de Rodrigo Arias. Eso solo confirma que hay un PLN nuevo.
Ni siquiera asegura que votará por PLN en febrero del 2014.
Ya se lo había escuchado y sí, me parece grave. Él está en el PLN que ha hecho presidente dos veces a su hermano y si uno está en un partido, debe respetar las reglas internas con humildad.
¿Es posible unidad nacional sin una unidad partidaria?
Mire, yo siento que el Partido está unido a pesar de Rodrigo Arias. Y siento que el arismo está conmigo a pesar de Rodrigo Arias.