La Comisión de Asuntos Hacendarios aprobó esta noche un dictamen de mayoría al Presupuesto Nacional del 2015, que implicaría rebajas por ¢97.000 millones en el plan de gastos propuesto por la administración de Luis Guillermo Solís.
Adicionalmente, los diputados avalaron posponer, para el 2020, el pago de unos ¢100.000 millones a los acreedores de bonos de deuda pública que se vencen el otro año. Para ello, el Ministerio de Hacienda deberá negociar un canje con los tenedores de los certificados.
Por último, la Comisión aprobó una norma presupuestaria que obliga a las instituciones públicas a utilizar sus recursos ociosos para financiar gastos, lo que podría generar otro ahorro de ¢100.000 millones.
El dictamen de mayoría contó con el voto de ocho diputados: Ottón Solís y Epsy Campbell, de Acción Ciudadana (PAC); Rolando González, Paulina Ramírez y Olivier Jiménez; de Liberación Nacional (PLN); Rosibel Ramos y Johnny Leiva, de la Unidad Social Cristiana (PUSC); y Abelino Esquivel, de Renovación Costarricense.
Votaron en contra tres diputados: Marco Vinicio Redondo, del PAC; y los legisladores del Frente Amplio, José Ramírez y Gerardo Vargas. Este último dijo que impulsarán un informe de minoría donde excluyen esta magnitud de recortes por considerar que afectará los programas sociales del Gobierno.
Ahora, el Presupuesto pasará al Plenario legislativo donde se debe aprobar en segundo debate a más tardar el 30 de noviembre.