San José
Los diputados le cortaron ¢50 millones al Ministerio de Salud Pública para destinarlos a la compra de un terreno para la Asociación de Jugadores Profesionales de futbol (Asojupro), en el presupuesto ordinario de la República para el 2014.
El movimiento de la partida se dio el 14 de octubre pasado, dos días antes de que la Comisión de Asuntos Hacendarios dictaminara el plan de gastos del Gobierno para el año entrante.
Quien propuso la moción fue el legislador Carlos Avendaño, del Partido Restauración Nacional, para que Asojupro cuente con un terreno para construir su sede.
Para el deporte. El congresista y pastor evangélico explicó anoche que los ¢50 millones salieron de una partida de consultorías en el servicio de desarrollo de sistemas informáticos de la cartera de Salud, que en total ascendía a ¢2.000 millones.
Justificó, también, que la Asojupro es una asociación sin fines de lucro que se dedica a promover el deporte y a dar apoyo a jóvenes futbolistas que carecen de recursos para estudiar.
"Ellos andaban buscando los recursos y creímos importante ayudarles por ser una organización sin fines de lucro y que cumple con una labor de bien social", sostuvo Avendaño.
Según el sitio web de Asojupro, su misión es velar por el bienestar personal y familiar de los jugadores profesionales de futbol durante la carrera deportiva de estos y en los años posteriores a su retiro de las canchas.
Asimismo, describe que entre los beneficios para sus asociados ofrece convenios comerciales, de salud, en educación universitaria y en asesoría legal nacional e internacional.
La Nación contactó anoche al presidente de la asociación, el exfutbolista Reinaldo Parks.
No obstante, dijo que no podía hablar sobre la partida—que, mencionó, está justificada—pues en ese instante conducía hacia Limón.
Después, no fue posible volver a localizarlo vía telefónica.
¿Pidieron criterio? Este medio le consultó a Carlos Avendaño si el recorte fue consultado al Ministerio de Salud, a lo que respondió que tenía entendido que ese trámite sí lo había realizado la comisión.
Ante la misma pregunta la diputada Siany Villalobos, del Partido Liberación Nacional (PLN), contestó que si el Ministerio de Salud tuviera alguna objeción sobre el recorte a su presupuesto, la tomarán en cuenta antes de avalar en el plenario el conjunto de partidas para el 2014.
"La moción traía la firma de muchas fracciones a solicitud expresa de Carlos Avendaño y el PLN la apoyó en virtud de que es para apoyar el deporte y la prevención", justificó la presidenta de la Comisión de Asuntos Hacendarios.
La ministra de Salud Pública, Daisy Corrales, no atendió el mensaje que se le dejó en su celular, ni devolvió las llamadas hechas por La Nación.
Críticas. El movimiento en el presupuesto levantó las críticas de los diputados del Partido Acción Ciudadana (PAC).
La parlamentaria Jeannette Ruiz dijo que ella y su compañero Gustavo Arias fueron los únicos que votaron en contra de la moción de Avendaño en la comisión.
"Vivimos escuchando al Ministerio de Hacienda sobre la escasez de recursos que vive el Gobierno y sobre la inflexibilidad para hacerle cambios al presupuesto, pero los diputados del PLN sí se ponen de acuerdo para mover una partida para una asociación de futbolistas", lamentó.
Ruiz agregó que tampoco apoyaron el traslado de los ¢50 millones, porque el PAC considera que las partidas responden a un proceso de planificación hecho por cada ministerio.
"Hay que respetar los planteamientos de los ministerios. Pero los diputados del Gobierno tienen otro concepto y manosean los recursos para financiar los programas de otras entidades", subrayó la legisladora del PAC.
Siany Villalobos no supo puntualizar cuáles bancadas respaldaron la moción por Avendaño y remitió a este medio a las actas de la comisión.
Buena fe. Sobre las críticas de la oposición, la legisladora oficialista contestó que la enmienda al presupuesto fue hecha "de buena fe", en el entendido de que todos aquellos recursos que sean para el deporte y la prevención de enfermedades, "no se pueden considerar como un gasto, sino como una inversión".
Los diputados solo aprobaron 23 de las más de 109 mociones que se presentaron para modificar los contenidos del presupuesto del 2014, por ¢6,6 billones (millones de millones), financiado en un 42,7% con emisión de deuda.
Ahora el plan de gastos llegará al plenario para su votación final, que debe ocurrir a más tardar el 29 de noviembre.
En la práctica, es casi imposible que el plenario se convierta en comisión general para hacerle nuevos movimientos al presupuesto, o para echar atrás aquellos cambios que se realizaron en el panel de Asuntos Hacendarios.