Sin anunciarlo y sin aspavientos, el diputado Víctor Morales Zapata escribió una carta al jefe de fracción del PAC, Marco Redondo, y llegó de improviso a la primera reunión de la bancada oficialista de setiembre.
El argumento del legislador, el más cercano de los oficialistas al presidente Luis Guillermo Solís, es que ya cumplió la suspensión de un año que le impuso el Tribunal de Ética y Disciplina del Partido Acción Ciudadana (PAC).
Si bien la presencia de Morales no desató los vendavales que la primera vez quebraron a la fracción y ahuyentaron a varios legisladores, la decisión sí vino a revolver a la agrupación.
“Él no debió llegar intempestivamente, sin consultarlo (...). Se creó un poco de tensión, pero el ambiente fue respetuoso, cada uno de los que quisimos hablar, lo hicimos”, dijo Nidia Jiménez, diputada alajuelense.
En su carta a Redondo, el diputado –desterrado de la bancada oficialista desde antes de iniciar labores legislativas– adujo que el Tribunal de Ética del PAC ratificó una suspensión de su militancia el 13 de agosto del 2014 y ya cumplió la sanción.
Silencio. La Nación intentó conocer las razones de Morales Zapata; sin embargo, desde el otro lado del vidrio que separa el plenario legislativo de la barra de prensa del Congreso, el legislador se negó a conversar con este medio.
Morales Zapata solo aceptó entregar una copia de la misiva presentada a Redondo y a sus compañeros de la fracción oficialista.
En ella enumera las acciones del órgano ético del Partido y anuncia su participación semanal en las reuniones del PAC.
“Incluso ante criterio del Tribunal de Ética del PAC soy miembro del Partido Acción Ciudadana, aunque en realidad nunca haya dejado de serlo. Por lo tanto, le informo que a partir de este día participaré de las reuniones de fracción reguladas en el artículo 8 del Reglamento legislativo, tal y como ha sido mi derecho hacerlo siempre”, termina la nota.
Ante los argumentos de Morales Zapata, Franklin Corella dijo que él no está de acuerdo.
Corella explicó que hay una orden del máximo órgano partidario, la Asamblea Nacional, que ordenó a la fracción, desde enero del 2014, antes de ir a elecciones, desconocer a Morales Zapata.
Quienes respetan esa directriz partidaria, enfatizan que esa decisión del máximo órgano no tiene fecha de caducidad.
A consulta. Ante el escollo que supone el asunto, Corella propuso elevar la consulta a la Comisión Política y la Asamblea Nacional, que se reúne el 19 de este mes.
La propuesta del alajuelense tuvo éxito y las consultas serán hechas, confirmó Marco Redondo, jefe partidario.
En tanto, Emilia Molina y Javier Cambronero, antiguos jefa y subjefe de bancada en el PAC, preparan una petición a los asambleístas para anular el destierro aplicado al congresista Morales.
La sanción se aplicó porque Morales no dijo que afrontó un proceso penal en 1994, acusado por el supuesto mal manejo de un préstamo con recursos del Instituto de Fomento Cooperativo (Infocoop), cuando era dirigente cooperativo. El caso se resolvió en conciliación.