Hoy la cúpula del PUSC se mantiene en su puesto, pese a que la salida de sus miembros es la principal condición exigida por Rodolfo Hernández para no renunciar, de nuevo, a la candidatura presidencial por esa agrupación.
El presidente de la Unidad Social Cristiana (PUSC), Gerardo Vargas, así como el secretario general, Wílliam Alvarado, rehuyeron explicar por qué no cumplen con la petición de Hernández.
El candidato presidencial socialcristiano pretende que ambos se dediquen a la campaña electoral y dejen de realizar labores administrativas en el PUSC.
Vargas aspira a una curul por Puntarenas, mientras que Alvarado por Heredia.
Ellos prometieron una respuesta para este lunes; sin embargo, no pasaron de escuetos mensajes en redes sociales, diciendo que no renunciarán.
“No vamos a renunciar, sí vamos a dialogar”, respondió Vargas a este medio, a través de su cuenta de la red Twitter. Más tarde, se limitó a comentar que no le fue posible dar una explicación ayer mismo.
Quien sí se fue de su cargo, aunque no ha trascendido si alguien se lo pidió, fue el jefe de campaña de Hernández, el aspirante a diputado por el primer lugar de San José, Humberto Vargas.
La noticia la confirmó Hernández, pues Vargas no contestó las llamadas que se le hicieron.
“Humberto Vargas renunció y estamos en el proceso de reorganización. Él me dio, como motivo, solamente que, en solidaridad de los cambios que se necesitan, ponía el puesto en mis manos”, afirmó el aspirante del PUSC.
Un pedido especial. La solicitud para que Vargas y Alvarado dejen sus puestos en el Comité Ejecutivo Nacional del PUSC está ligada al trabajo que, según Hernández, deben hacer los candidatos a diputado en sus provincias.
Sin embargo, Hernández todavía no tiene una respuesta de los dos miembros de la cúpula de la agrupación socialcristiana.
“De ellos no he recibido comunicación. Espero que consideren esa posición, porque es necesaria para la campaña”, afirmó el candidato ayer en el portón de su casa, en Sabanilla de Montes de Oca.
Las reglas internas del PUSC disponen que solo a través de una renuncia o por votación de mayoría calificada (dos terceras partes de los miembros, o sea 47 delegados) de la Asamblea Nacional del PUSC, se puede destituir a los miembros del Comité Ejecutivo Nacional.
Así lo aclaró anoche el presidente del Tribunal Electoral Interno de la Unidad, Mario Redonet.
“Tiene que haber un procedimiento. La moción no puede decir simplemente: ‘Quitemos a tal o cual’. Solo se puede mediante una moción presentada por un asambleísta, con su debida justificación”, explicó Redonet.
La noche del sábado, en una nota enviada a los medios de comunicación, Hernández exigió que la salida de los miembros del Comité Ejecutivo debe darse antes del 19 de octubre.
“El cumplimiento de esta condición es necesaria para permitirme contar con los instrumentos requeridos para poder operar a nuestra agrupación de lo denunciado el pasado jueves”, dijo Hernández.
Con esta declaración, hizo referencia a una carta que circuló la tarde del jueves en los medios de comunicación, en la que acusó a sus partidarios de traición.
“He hecho un gran esfuerzo para continuar, pero no soporto más puñaladas por la espalda”, comentó ese día Rodolfo Hernández