Ya ocurrió con el presupuesto vigente y así está planteado para el del próximo año. Cero es la cifra de dinero que la Cancillería gira a la Iglesia católica, a cargo de la religión oficial del Estado.
Parecen haber quedado en el pasado las partidas de decenas de millones de colones para determinadas diócesis o la Arquidiócesis de San José, dinero que se usaba en su mayoría en la reparación de templos.
Un reporte entregado por la Cancillería y el presupuesto que envió a la Asamblea Legislativa para el 2016 muestran la extinción de los giros que, hasta el 2014, se hicieron por varias decenas de millones de colones.
Fueron ¢300 millones en el 2014, ¢180 millones en el 2013, ¢50 millones en el 2012, ¢150 millones en el 2011 y ¢395 millones en el 2010, de acuerdo con la información entregada por el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto.
En cambio, en el presupuesto vigente para el 2015 (el primero que se elaboró durante el gobierno de Luis Guillermo Solís) estos aportes quedaron excluidos, e igual va para el plan de gastos del 2016.
Consultado ayer por las razones, el canciller Manuel González dijo que en general la Cancillería ha limitado su presupuesto y que antes este ministerio asumía rubros que no le correspondían.
“Yo diría que es una tendencia, pero no quiero comprometer lo que pueda pasar en el futuro. Otras personas podrían tener otra visión frente a las circunstancias de limitación económica”, justificó el canciller, quien aseguró no haber recibido peticiones ni presiones para destinar recursos de su cartera a la Iglesia católica.
“Me siento más cómodo sabiendo que el concepto de Culto que está a cargo de este Ministerio no significa dar dinero a las iglesias”, añadió González, a cargo del Ministerio que presupuestó ¢25.510 millones para el 2016, ¢3.000 millones menos que el vigente en este 2015.
Consultado por el tema, el asesor legal de la Conferencia Episcopal de Costa Rica (Cecor, que reúne a los obispos católicos), José Rafael Fernández, dijo que desde hace años se vienen reduciendo los montos para la Iglesia católica. “Ya no existen esas partidas como antes. Últimamente eran montos muy específicos para reconstrucción de templos”.
Otros dineros. Tampoco es que el Estado haya dejado de dar subsidios a la Iglesia. El Ministerio de Educación Pública (MEP) destinará, en el 2016, ¢428 millones a las Temporalidades de la diócesis de Tilarán, y el de Cultura, ¢17,5 millones para que la Arquidiócesis de San José dé mantenimiento a su archivo histórico.
El dinero del MEP para la Iglesia corresponde al monto negociado en el 2009 para pagar profesores en los colegios católicos privados y subvencionados por el Estado.
Algunos docentes de estos colegios subvencionados se encuentran en la planilla del MEP, pero los ubicados en la diócesis de Tilarán eligieron en el 2009 contratarlos por su cuenta, con el dinero estatal.
La negociación en ese momento fue entre monseñor Vittorino Gerardi y el entonces ministro de Educación, Leonardo Garnier.
“No es un esquema que me encante. Lo positivo es que son buenos colegios o escuelas y cumplían con una mensualidad no mayor a los ¢ 60.000 por estudiante, para incluir población de menores recursos. Además, algunos hacen un trabajo muy bueno, como el Salesiano Don Bosco”, recordó ayer el exministro Garnier, cuya posición intentó favorecer la separación entre lo religioso y lo público.
El asesor legal de la Iglesia católica costarricense dijo que también puede haber dineros que llegan a las parroquias por vía de las municipalidades, los cuales escapan a la contabilidad central.