“Si estuviéramos hablando con don Pepe (Figueres), probablemente hubiera dicho: ‘En estas condiciones, ni resucitando yo ganamos’”.
Con esta frase, el expresidente José María Figueres Olsen describió ayer la situación por la que atraviesa el Partido Liberación Nacional (PLN) e hizo un llamado a cambiar el mapa de ruta de la agrupación política.
El escenario fue la Asamblea Nacional que se celebró ayer sábado en el Edificio Cooperativo, en San Pedro de Montes de Oca. La cita se dio siete meses después de la histórica derrota electoral del PLN en los comicios en que resultó electo el Partido Acción Ciudadana (PAC), con Luis Guillermo Solís a la cabeza.
En su discurso –que encendió a los 102 asambleístas presentes– el exmandatario criticó que el partido está desligado de sectores que históricamente le han dado apoyo (el cooperativo, los agricultores, los trabajadores y la clase media).
También cuestionó que se carece de posiciones sobre temas claves, como el desarrollo de infraestructura y la generación de energía.
“Es mejor pasar la raya aquí y ver hacia el futuro. En estas condiciones, es imposible ganar una elección”, advirtió.
A la cita también acudieron la expresidenta Laura Chinchilla, el excandidato presidencial Johnny Araya y Ángel Edmundo Solano, en representación del expresidente Luis Alberto Monge. En tanto, el exmandatario Óscar Arias no se presentó por estar fuera del país.
Figueres fue el único expresidente que dio un mensaje a los verdiblancos, ya que Chinchilla se retiró al iniciar la tarde.
El último en subir al escenario fue Johnny Araya, quien comenzó su intervención diciendo que “daba la cara” ante los resultados electorales y explicó las razones por las cuales decidió abandonar la campaña ante una segunda ronda electoral. Admitió que el paso debió ser “más consultado”.
“Quise aprovechar la Asamblea Nacional para expresarles cosas que, tal vez, no habían sido escuchadas sobre las circunstancias que habían rodeado mi decisión”, dijo Araya, quien aseguró sentirse satisfecho con la reacción de los verdiblancos.
Rendición de cuentas. La revisión de la salud del PLN también pasó por el estado de las finanzas producto de la contienda electoral. Bernal Jiménez, presidente del partido, introdujo el tema pidiendo al comando de campaña de Johnny Araya saldar la deuda política antes de febrero del 2015, cuando él deje el Balcón Verde.
En este sentido, Antonio Álvarez, jefe de campaña de Araya, aseguró a los asambleístas que el préstamo de ¢5.000 millones con los bancos Lafise y Promérica, que sirvió para financiar parte de la campaña, quedará casi saldado con el pago de ¢190.263.500 ($350.000).
Tal monto fue donado por Álvarez, Johnny Araya, Fabio Araya (papá de excandidato presidencial), Orlando Guerrero (tesorero de la campaña) y Marco Cercone (contribuyente del grupo).
Con ello, dijo Álvarez Desanti, el hueco financiero con los bancos se limitará al pago de los intereses del préstamo que se pagaría con el adelanto de la contribución estatal que le corresponde al PLN por los gastos de la contienda.
“La estimación es que se adeudarán ¢60 millones (al mes de diciembre), los cuales se originan por el atraso del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) en aprobar las partidas de deuda política. Si el pago se hubiera dado al 30 de setiembre, los $350.000 bastarían”, explicó Álvarez.
Empero, el gran reto del partido será responder por los ¢174 millones que se deben a proveedores de servicios (como transporte) durante la campaña electoral.
En la agenda quedó pendiente la convocatoria a un congreso ideológico en el 2015 y la discusión para cambiar los estatutos del partido.