Empleados del aeropuerto internacional Juan Santamaría presionan a Aeris, empresa administradora de la terminal, para que disponga de un comedor.
La compañía tiene pendiente, desde el 2011, la construcción de un espacio para que los 5.000 trabajadores hagan sus tiempos de comida.
Por esta razón, el 6 de abril, la Defensoría de los Habitantes solicitó al Consejo Técnico de Aviación Civil informar sobre los avances de la obra.
La intervención de la Defensoría se dio luego de recibir una denuncia por parte de un empleado de apellidos Solís Hernández, en el 2013.
“El asunto acá es que a los empleados se nos corta la libertad de ingerir los alimentos en nuestra área de trabajo, como regularmente ocurre en cualquier empresa. Tenemos que desplazarnos a más de 600 metros de distancia y, en ocasiones, bajo condiciones atmosféricas adversas”, manifestó Solís en su queja.
“A veces, nos arriesgamos a comer en alguna sala de abordaje desocupada, comiendo nuestra comida fría y a escondidas, pues si el personal de Aeris nos ve, nos decomisan nuestro gafete de entrada”, agrega la nota.
La acción del trabajador derivó en una recomendación, emitida en el 2014, para que el administrador habilitara un comedor para empleados. También, el Ministerio de Trabajo realizó la recomendación.
En el aeropuerto convergen funcionarios de aerolíneas, empresas comerciales y diferentes instituciones públicas.
Silvia Chaves, vocera de Aeris, afirmó que la soda interna estará lista a finales de este año.
En la actualidad, está pendiente la contratación para los acabados y el equipamiento del edificio de 400 metros cuadrados.
“Está construido, por decirlo así, el cascarón, pero ahora hay que trabajar el interior y equiparlo (...). Aeris ya tomó cartas en el asunto. Desde el año pasado se inició el nuevo edificio comercial y se reservó el espacio en el que va el comedor”, aseguró Chaves.
La funcionaria no detalló el costo del proyecto, pues podría afectar las ofertas que se presenten en las próximas semanas.