Los sistemas informáticos de la Dirección General de Migración y Extranjería usan programas que ya cumplieron su vida útil y con problemas de calidad de información. Tienen tales dificultades para integrarse, que las principales aplicaciones ni siquiera pueden compartir datos clave entre ellas para la toma de decisiones.
Esa es la principal conclusión del informe de auditoría DFOE-PG-IF-21-2017 de la Contraloría General de la República (CGR), el cual examinó el control de la calidad y seguridad de la información utilizada para la toma de decisiones gerenciales de "procesos sustantivos" de Migración y Extranjería.
La CGR halló que un efecto de esa debilidad en la seguridad de la información es que se compromete la continuidad de los servicios de la Dirección.
LEA MÁS: Lento trámite migratorio ocasiona fila de 100 metros en aeropuerto Juan Santamaría
Según el informe, esos servicios peligran "al no existir planes completos que garanticen que las actividades críticas no van a sufrir detrimento cuando se presente una interrupción de la plataforma tecnológica". Si hay un fallo, indica la CGR, es imposible asegurar servicios básicos al usuario durante la contingencia.
Entre esos servicios amenazados hay actividades "tan críticas", indica el informe, como la verificación de salida de menores del país, impedimentos de salida o entrada de adultos y el control migratorio de documentos de viaje (pasaportes), entre otras.
El análisis de la CGR se hizo en el primer semestre del 2017, meses antes del estreno de un nuevo sistema de control migratorio en aeropuertos internacionales que Migración implementó en setiembre.
Desde entonces, la nueva plataforma "Migración Visible" ha tenido diversas complicaciones que han derivado en atascos de pasajeros entrando y saliendo del país y atrasos en el despegue de aviones; aparte de reclamos tanto de aerolíneas como responsables de las terminales por el caos ocasionado. Hasta hoy, Migración atribuye estos problemas a factores externos.
LEA MÁS: Aerolíneas reprochan a Migración 'fallas inaceptables' por atraso en salida de pasajeros
Otra falla vulnerabilidad consiste en que el área de Gestión de Tecnologías de Información carece de información inmediata para variar los derechos de acceso a los programas de funcionarios que cambiaron su situación laboral dentro de la Dirección General de Migración y Extranjería.
Esta condición, indica el documento, "puede llegar a permitir la manipulación de información confidencial, sensible y relevante por parte de personas que ya no deberían tener estos privilegios".
Otro riesgo para la plataforma tecnológica es la existencia de versiones diferentes de sistemas operativos en programas informáticos similares, lo cual dificulta la actualización y estandarización de toda la plataforma tecnológica de la institución, "así como la existencia de aplicaciones obsoletas, algunas de ellas inclusive sin respaldo del fabricante".
Debilidades admitidas
Gisela Yockchen, directora de Migración y Extranjería, admitió los problemas señalados pero prometió también soluciones a estos en los plazos que la CGR fijó en el informe; es decir, para entre marzo y junio según una serie de recomendaciones.
"Que tengamos riesgos, porque sí los tenemos, problemas en nuestras plataformas, no significa que nuestros servicios no operan con normalidad", aseguró Yockchen.
Según la funcionaria, este año la entidad realizará inversiones importantes en equipos y programas para lo que denominó un "renovación general de la plataforma informática".
Yockchen aseguró que gastarán unos ¢15.000 millones en la compra de un nuevo sistema de control migratorio. La licitación pública del proyecto, agregó, salió a publicación en diciembre.
El cambio de sistemas sería en tres etapas y se desarrollarían entre este año y el 2020. Se supone que, una vez adjudicado el proyecto, la primera de etapa de mejora estaría lista en unos seis meses.