La Contraloría General de la República (CGR) dio a conocer ayer que anuló la adjudicación para el diseño de las obras de la trocha fronteriza o ruta 1856.
Lo anterior responde a una resolución de los recursos de apelación planteados por las empresas Imnsa Ingenieros Consultores S.A. y Consorcio DEHC-ITP en contra de esa adjudicación, promovida por el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) y otorgada a la Compañía Asesora de Construcción e Ingeniería S. A. (Cacisa).
En este caso, la Contraloría consideró que existe nulidad absoluta del acto de adjudicación en razón de que “la Administración no logró demostrar que dicha empresa no se encuentra afecta al régimen de prohibiciones”.
Tal y como establece la Contraloría, el Conavi ahora deberá emitir un criterio técnico-legal con el cual garantice que esa empresa no tiene restricciones y por lo tanto califica como elegible para desarrollar los diseños de la obra.
El Conavi señaló ayer que preparará el informe que solicita la Contraloría para emitir un nuevo acto de adjudicación con las firmas que participaron.
José Fabio Ramírez, abogado de Imnsa, indicó que esa compañía presentará una medida cautelar para que el Conavi realice una licitación pública nueva y no repita la adjudicación en la que ellos no salieron elegidos.
El contrato para el diseño y elaboración de planos y otras especificaciones técnicas para la construcción de la llamada carretera 1856, tenía un costo de ¢360 millones.