La Contraloría General de la República (CGR) atribuyó una "variedad de inconsistencias" al Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y a la Junta Administrativa del Servicio Eléctrico Municipal de Cartago (Jasec), que encarecieron en $90 millones la planta hidroeléctrica Toro 3.
El ente contralor realizó una auditoría al ICE y a Jasec, los cuales se asociaron para desarrollar la hídrica Toro 3; así como al Banco de Costa Rica a cargo del fideicomiso mediante el que se financió y arrendó esta planta localizada en Marsella de Venecia, en San Carlos, Alajuela.
Una de sus principales conclusiones es que hubo una "débil evaluación financiera y económica del proyecto" de 50 megavatios (MW) de capacidad instalada.
El informe asegura que el ICE "no utilizó prácticas apegadas a criterios y técnicas generalmente aceptadas de evaluación de proyectos, al elaborar los flujos de caja de inversión y operación de la evaluación financiera y económica del estudio de factibilidad de octubre 2006 del proyecto Toro 3".
En el flujo de las inversiones, por ejemplo, el ICE no incluyó los costos financieros o de oportunidad del capital invertido. En la evaluación a precios corrientes, también omitió el incremento previsible en los precios de los insumos de la construcción de la planta.
LEA MÁS: Diputados piden cuentas a ICE y CNFL por impacto de inversiones en tarifas de luz
Según el ICE y JASEC, la Planta Hidroeléctrica Toro 3 iba a costar $104,1 millones conforme el estudio de factibilidad de octubre 2006. Sin embargo, terminó costando $194,1 millones para el 2012 cuando concluyeron las obras.
Esto incremento de $90 millones, según la Contraloría, se debió al pago de mano de obra y costos indirectos como alimentación, transporte y hospedaje del personal técnico durante tres años de periodo constructivo entre 2011 y 2013.
Según el informe DFOE-AE-IF-00012-2017 del 29 de noviembre pasado, "hubo dilación en la orden judicial para la entrada en posesión de algunos terrenos según lo planeado; y por aumentos extraordinarios en los precios del acero, cemento y combustible utilizados".
Otras omisiones atribuidas al ICE y a Jasec fueron la "no estimación del costo de los terrenos donde se localizarían las obras del proyecto".
Esto, asegura la CGR, "aumentó la brecha entre los costos estimados y los incurridos; no porque constituyan gastos extraordinarios, sino porque forman parte de la omisión de partidas básicas en el presupuesto de las inversiones".
Golpe a tarifas por denominación incorrecta
Por otra parte, el fideicomiso de la planta Toro 3 no ha aplicado la retención anticipada del 2% del impuesto sobre la renta a ninguno de los pagos a sus proveedores locales de bienes y servicios.
LEA MÁS: Contraloría pide indagar anomalía con impuesto en fideicomiso ICE-BCR de planta Garabito
La CGR había solicitado en noviembre a la Dirección General de Tributación realizar una fiscalización para determinar si hubo una irregularidad tributaria en otro fideicomiso: el conformado por el Banco de Costa Rica (BCR) y ICE para la planta térmica Garabito (Puntarenas).
En el caso de Toro 3, la Contraloría también halló (como en el caso de Garabito), una incorrecta clasificación del arrendamiento como operativo en vez de financiero.
Como arrendamiento operativo, explica el informe de auditoría, todo gasto de la planta se traslada a la tarifa que pagan lo usuarios de electricidad. En cambio, como arrendamiento financiero, solo se podrían cargar a la tarifa la tasa de interés del fideicomiso, pero no, por ejemplo, la amortización de los proyectos de generación.
En consecuencia, al registrar el arrendamiento como operativo, el período de recuperación de la inversión (12 años de arrendamiento) es menor a la vida útil de la planta (más de 20 años) con lo cual se presionan al alza las tarifas.
Como parte de sus disposiciones, la CGR ordenó a Eduardo Ramírez Castro, gerente del Banco de Costa Rica, reestructurar la información financiera para que se reclasifique el arrendamiento de Toro 3 como financiero en vez de arrendamiento operativo.
Aparte de Garabito y Toro 3, el ICE tiene bajo esquema de arrendamiento operativo el Proyecto Geotérmico Las Pailas (Guanacaste) y la hidroeléctricas Cariblanco en Sarapiquí (Alajuela), según detallan sus estados financieros.
Inconvenientes se sabían
Consultada sobre el informe de auditoría, JASEC afirmó que tanto la Junta como el ICE han señalado en "múltiples ocasiones los inconvenientes sufridos, tanto exógenos como endógenos del país y no inconsistencias como lo declara erróneamente la CGR".
"Entre ellos se pueden citar el precio del acero y del petróleo a nivel externo; el terremoto de Cinchona y la larga cadena de litigios por expropiaciones de terrenos (36 en total), que incidieron directamente en el aumento de los costos de Toro III", detalló Dagoberto Quirós, covero de Jasec.
Según Quirós, la omisión de costos en el estudio de factibilidad no provocó sobrecosto en el costo final del proyecto. Efectivamente lo que provocó fue una brecha entre el costo real y los costos previstos en el estudio de prefactibilidad del 2006.
"No era posible estimar una partida extraordinaria con las variaciones que se dieron en este proyecto" afirmó Quirós.
A las 10:31 a.m. de este lunes, este diario también consultó al ICE sobre el informe de auditoría. El departamento de prensa del ICE respondió: "estamos trabajando en el tema".
Puede leer el informe completo aquí: https://cgrfiles.cgr.go.cr/publico/docs_cgr/2017/SIGYD_D_2017018248.pdf.