Los empresarios del sector industrial pidieron a la Aresep rebajar la luz en 11%, a partir del tercer trimestre de este año, con el argumento de que no debe reconocérsele gastos innecesarios al ICE.
Los industriales cuestionan desembolsos por ¢17.500 millones hechos por el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) en compras de diésel para generación, que fueron trasladados a las tarifas.
El diésel es más caro que el búnker, por lo que su impacto en el costo de producción térmica es mayor.
La Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR) cree que el ICE pudo evitar ese gasto.
La Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) autorizó al ICE a gastar un 10% de diésel y un 90% de búnker. Sin embargo, cifras en poder de los empresarios demuestran que esa condición solo se cumplió en enero y en junio.
Esto provocó que el precio por kilovatio hora pasara de ¢82, que presupuestó la Aresep, hasta un un máximo de ¢124.
“Amparados en que el servicio al costo no implica que se tienen que cargar todos los costos, sino únicamente los necesarios para producir el servicio, solicitamos a la Aresep que, en cumplimiento de su papel de equilibrar los intereses entre el operador y el consumidor, defienda a este último y rebaje la tarifa eléctrica en el tercer trimestre del 2013”, advirtió Carlos Montenegro, subdirector de la CICR.
Agregó que dicha disminución (11%) debería ser adicional a la del 16% prevista para ese trimestre.
Ante las críticas, el vocero de prensa del ICE, Elbert Durán, recordó que se usó diésel por circunstancias ajenas al control de la entidad, como fue falta de abastecimiento oportuno de los proveedores de búnker.
Carolina Mora, vocera de prensa de la Aresep, informó de que esta semana tendrán los cálculos sobre la variación de las tarifas en el último semestre, pero no hay certeza de que sea una rebaja.
Mora confirmó el crecimiento en los gastos de carburantes.
De enero a julio, la producción térmica sumaba una factura de ¢93.000 millones, casi un 30% más de lo presupuestado por la Aresep para todo el año ( ¢73.200 millones).
Los industriales creen, además, que el modelo para ajustar las tarifas eléctricas, denominado Costo Variable por Combustible (CVC), representa “un cheque en blanco” para gastar todo lo que desee en combustibles para generación .
El mecanismo permite que cada tres meses se revise el gasto real en compras de combustible y se le reconozca al ICE lo erogado.
Los empresarios dicen comprender el problema del cambio climático y la necesidad de complementar energía hidroeléctrica con generación térmica, pero no aceptan gastos “sin control”.
Elbert Durán, del ICE, replicó que el CVC nunca será un cheque en blanco y, por el contrario, es una metodología técnica que documenta todo lo que se consume para calcular las tarifas eléctricas. Agregó que el ICE debe garantizar el suministro de energía al país “no importa lo que le cueste producirla”.
En enero, las tarifas subieron entre 9% y 14%, y en abril aumentaron entre 3% y 13%.