Cartago Dar gracias a la Virgen de los Ángeles por el curso lectivo, pedir sabiduría para los próximos exámenes y fomentar las tradiciones católicas, fueron las razones que llevaron a decenas de estudiantes ayer a la basílica.
Antony Borloz, Pedro José Vargas y Catalina Agüero, alumnos del Colegio Nuestra Señora de Guadalupe, de Heredia, corrieron a llevar un poco de agua bendita antes de que se fuera el bus que los trasladaría de vuelta.
“Es una tradición. Vinimos a dar gracias a la Virgen y a pedirle ayuda para lo que sigue”, expresó Borloz mientras caminaba.
Entre tanto, Irene Alfaro, estudiante de décimo año del Colegio Iribó, de Curridabat, expresó que en ese centro educativo les inculcan la fe católica y es una tradición ir a la basílica.
“Lo más importante es la unión del grupo en este tipo de actividades. Venimos como parte de las tradiciones de fe del colegio y para fomentar la devoción a la Virgen de los Ángeles”, dijo Alfaro, junto con otras compañeras.
Los más pequeños también fueron parte de la visita al santuario nacional. Los niños de la escuela y kínder del Centro Educativo Santa María de Aserrí ocuparon las gradas a un costado de la basílica para rezar el rosario antes de dirigirse a la gruta para recoger agua bendita.
“Es una tradición del centro educativo. Nosotros somos devotos de la Virgen María y desde pequeños fomentamos esa devoción. Hoy vienen tres buses con estudiantes”, expresó Carolina Retana, una de las docentes que acompañaba a los menores.
Ordenado y limpio. Los últimos detalles se preparaban ayer en la basílica y sus alrededores para recibir a la mayor parte de los romeros, el próximo 1.° de agosto por la tarde, noche y madrugada del 2.
La vigilancia de oficiales de la Fuerza Pública, Tránsito y Policía Municipal era visible.
Varios voluntarios guían y mantienen el orden de ingreso de los fieles a la basílica para llegar al altar de rodillas, así como a los que van a recolectar un poco de agua bendita de la gruta.
La limpieza es un punto alto, tanto en la plaza frente a la basílica como en las calles aledañas.
Lo que sí se mantiene es la congestión vehicular en el centro de Cartago, en parte por el cierre de algunas vías y también por quienes estacionan en la calle.